BEBIDA ORIGINAL

Sangría blanca de piña y coco

Descubre esta original sangría de piña y coco y ameniza tus veladas con una bebida refrescante y diferente.

Sangría

Sangría Pexels

Publicidad

Una de las bebidas más populares de la gastronomía española que podemos encontrar en cualquier bar, restaurante, chiringuito, local de copas y barra de cualquier festival es la sangría.

Es una bebida refrescante, hecha a base de vino -tradicionalmente tinto-, piezas de frutas y azúcar. Esta es la receta más clásica, pero hay un sinfín de variedades -incluso variantes sin alcohol-, tantas que la IBA (Asociación Internacional de Bármanes) no la reconoce como cóctel.

Según la zona geográfica, en lugar de vino tinto se utiliza sidra -en Asturias es muy típico-, o vino blanco -llamadas sangrías blancas- o vinos espumosos como el cava o el champán -en el Levante es muy popular el "agua de Valencia"-.

Además, se puede añadir otra bebida alcohólica, licores como los de frutas -manzana, melocotón, moras-, de alta graduación como el brandy o el jerez, el triple seco como el Cointreau o un vermú como el Martini.

Cualquiera de las variantes de la sangría es ideal para refrescarse cuando suben las temperaturas en días soleados tras largas jornadas en la playa o en la piscina, aunque también es fantástica para tomar en aperitivos e incluso para degustar en las comidas, dado que acompaña estupendamente cualquier plato -especialmente arroces-.

Receta de la sangría blanca de piña y coco

Ingredientes

  • 2 l de vino blanco
  • 15 cl de Malibú
  • 20 cl de gaseosa o agua tónica
  • 3 tazas de piña fresca o natural o 1 lata grande de piña en almíbar
  • 200 ml de agua de coco
  • 1 lima o limón

Modo de elaboración

1. Cortamos en dados de tamaño mediano la piña -ya sea fresca, natural o en almíbar- y cortamos algunas rodajas de lima y colocamos la fruta en un bol.

2. Agregamos el Malibú en este cuenco para que los trozos de fruta se vayan impregnando del sabor del licor y reservamos.

3. En una jarra de cristal de gran tamaño -o el recipiente que deseemos tener la sangría acabada- vertemos el vino, el agua de coco y la gaseosa o tónica.

4. En este punto se puede agregar una cucharada de azúcar o del almíbar de la piña si se prefiere una bebida más dulce.

5. Removemos bien todos los líquidos para que se mezclen e incorporamos las piezas de fruta maceradas en el licor.

6. Introducimos en el frigorífico y dejamos que se enfríe bien hasta media hora antes de consumirla.

7. Servimos la sangría en un vaso con cubitos de hielo -o hielo picado- y decoramos con una rodaja de lima. Ya está lista la bebida para brindar y degustar, ¡salud!

El secreto de una buena sangría

A pesar de que la bebida es conocida en todo el mundo, tiene bastante mala fama por los efectos embriagadores que provoca su abuso, sobre todo en las zonas más turísticas cuando el calor aprieta.

Los enólogos más puristas critican el uso del vino para elaborar bebidas como la sangría, el rebujito o el calimocho, pero el secreto para conseguir una buena mezcla en este tipo de bebidas reside únicamente en la calidad de los ingredientes. Un buen vino, licores de calidad y, por supuesto, unas frutas en su punto de maduración consiguen el equilibrio perfecto de esta refrescante, especiada y dulzona bebida.

Novamas» Cocina

Publicidad