Suceso

Entra en un gimnasio con una pistola simulada y se atrinchera en los vestuarios

El individuo mostró el arma a la limpiadora para después dirigirse hacia el monitor de la sala. Le amenazó con golpearle y dispararle.

Pistola simuladaCedida

Los usuarios de un gimnasio de Santa Cruz de Tenerife no salían de su asombro al ser testigos de lo que estaban viendo.

A primera hora del día, a las 8:20 horas, un hombre, de unos 30 años, se presentaba en la instalación deportiva con una pistola en mano.

Comenzó a amenazar a los usuarios con quitarse la vida, acto seguido se atrincheró en los vestuarios.

Inmediatamente, una trabajadora de limpieza del gimnasio pudo llamar a la sala del 091, que recibió una llamada de emergencia alertando de que un hombre se encontraba en el interior del gimnasio apuntándose con un arma en la cabeza.

La persona que dio la voz de alarma había presenciado cómo el individuo mostraba una pistola y decía que quería hablar con un policía.

Según cuentan algunos testigos, minutos antes, la persona amenazante, que también es usuario habitual del centro deportivo, había recibido una llamada telefónica que lo había alertado. Entonces comenzó a gritar en mitad de la sala de entrenamiento.

El momento de mayor tensión con la pistola

El individuo mostró el arma a la limpiadora para después dirigirse hacia el monitor de la sala. Le amenazó con golpearle y dispararle con la pistola.

El monitor aprovechó un momento en el que el agresor perdió el equilibrio al golpear una puerta y consiguió escapar hasta un despacho.

Allí se refugió, pero el agresor lo siguió. Le obligó a colocar sus manos en la nuca y a arrodillarse, para terminar apuntándole con la pistola en la cabeza. Antes de que llegasen los agentes de la Policía Nacional, el individuo se atrincheró en los vestuarios. Allí lo localizó la policía, aún estaba armado. Los agentes ya habían evacuado a todo el personal que se encontraba en las instalaciones y habían establecido un perímetro de seguridad.

Uno de los policías consiguió entablar conversación con el agresor. Finalmente, accedió a soltar la pistola que resultó ser simulada. El detenido fue trasladado a un centro médico cercano a la zona para ser valorado. Posteriormente fue puesto a disposición judicial como presunto autor de un delito de amenazas graves.