El rey Carlos Gustavo de Suecia ha decidido suprimir de la Casa Real a varios de sus nietos y reducir así el número de miembros de la institución, comunicaron fuentes reales suecas. Del total de siete nietos del monarca solo seguirán formando parte de la Casa Real los dos hijos de la princesa heredera Victoria; Estela y Óscar, de siete y tres años respectivamente.
Los otros cinco continuarán integrando la familia real y conservarán sus títulos de duque o duquesa, pero dejarán de tener el tratamiento de altezas y, por tanto, no asumirán tareas institucionales ni tendrán asignación económica propia.
Los nietos que quedarán fuera de la Casa Real son los hijos de la princesa Magdalena, casada con el empresario británico Chistopher O'Neill, así como los del príncipe Carlos Felipe y su esposa, Sofia Hellqvist. Todos ellos tienen entre uno y cinco años.
La medida implica que, cuando sean adultos, podrán dedicarse sin restricciones a negocios privados o cualquier profesión de su elección. Según indicó el portavoz de la Casa Real, Fredrik Warsäll, la decisión ha sido adoptada tras un largo proceso de reflexión y no implica una reducción de la asignación global que percibe la institución.
