El Monumento a Franco de Tenerife genera polémica en la población, dividida entre quienes quieren mantenerlo y los que prefieren quitarlo

La Academia Canaria de Bellas Artes pide que el Monumento a Franco situado en Santa Cruz de Tenerife se declare bien de interés cultural, pero su futuro pasa por una resolución judicial.

El Ayuntamiento y el Cabildo no pueden tomar una decisión al respecto pues tienen que esperar a que un juez tome una decisión después de que un abogado experto en memoria histórica denunciase que se está incumpliendo la Ley al mantener en una de las principales arterias de la ciudad un monumento a Franco.

Esta decisión ha generado polémica en la calle pues hay parte de la población que defiende la permanencia del monumento, al considerar que forma parte de la ciudad, mientras que otra parte está en contra de mantener un monumento al dictador.

Por otro lado, el Centro para la Conservación del Patrimonio (Cicop) cree que el monumento a Franco tiene valores artísticos. La Fundación considera que la escultura constituye uno de los ejemplos en los que el pasado convive con el presente y el futuro.

Es una de las conclusiones del informe que han elaborado sobre el monumento, a propuesta del Consistorio de la capital, y del que tuvo conocimiento ayer la Junta de Gobierno. Este informe señala asuntos como: “ ha venido adquiriendo unas señas de identidad que a lo largo de los años los ciudadanos han identificado como suyas, dejando al margen la carga ideológica que tuvo en otra época y adoptando expresiones sociales y valores culturales acordes con la democracia del siglo XXI”.