Suiza es una de las ciudades más caras del mundo y si la comparamos con España, la vida en Ginebra es infinitamente más costosa que en Madrid o en Barcelona. Alquilar un piso pequeño, de una sola habitación, puede costar hasta 2.500 euros al mes; si es de dos dormitorios, el precio se dispara entre los 5.000 y los 7.000 euros mensuales.
Un adulto que viva en Ginebra necesita unos 1.300 euros cada mes solo para gastos básicos como hacer la compra o viajar en transporte público. Tomar una cerveza en un bar puede costarnos hasta ocho euros, o cuatro en el caso de un refresco.
Hacer la compra también puede ser prohibitivo: solo un kilo de pollo cuesta más de 20 euros y uno de ternera supera los 40.
Teniendo en cuenta que de momento Anna Gabriel no ha aclarado con qué ingresos cuenta, la pregunta es de qué va a vivir en Ginebra la exdiputada de la CUP. Ella dice que podría seguir con su carrera como profesora, pero según varios españoles que viven allí, no le va a resultar nada fácil.
Ginebra es una ciudad que se mueve por el dinero, los empresarios y el capitalismo, el reino de la banca y del paraíso fiscal. Todo lo que tanto ha criticado la exdiputada antisistema y que curiosamente ahora ha escogido como nuevo lugar de residencia.
Desde allí, Gabriel asegura que seguirá luchando por independencia de Cataluña y Suiza ha indicado que podría darle asilo si entiende que hay "pruebas concretas y fundamentadas" de persecución en España.
Recordamos que la exdiputada de la CUP se trasladó a Suiza hace unos días para preparar su "estrategia de defensa" y evitó comparecer este martes ante el Supremo por su implicación en el 'procés' que culminó con la declaración unilateral de independencia de Cataluña. Pesa sobre ella una orden de detención, pero válida sólo dentro de las fronteras españolas.
