Hombre conservador, muy atado a las tradiciones
Perteneciente a una familia de guerreros de alto linaje, Teodoro no nació con dotes ni valentía para la guerra y decidió dedicarse a administrar sus territorios y a la cría de ovejas.
Para ello, a su cargo tiene a numerosos pastores hispanos, entre ellos Viriato, que cuidan de sus tierras y sus rebaños. Hombre conservador, muy atado a las tradiciones, la llegada de su hija Helena le supone un paso más para llegar a convertirse uno de los hispanos más ricos.
Teodoro ha comprometido a su hija con Alejo, un rico aristócrata que ha prometido a cambio formar parte de su negocio minero.