Süreyya solo aceptará el perdón de Yaman con una condición: “Merezco un ascenso por la humillación que me has hecho pasar”

Yaman se ha presentado ante Süreyya con la intención de disculparse sinceramente después de haberle propuesto matrimonio y luego retractarse.

Con el corazón en la mano, el hombre ha reconocido que estaba confundido cuando tomó la decisión de apostar con ella y, además, ha admitido sus errores.

Sin duda, la noticia del embarazo de Suzan le ha pillado por sorpresa, y dejándose llevar por sus sentimientos, le ha pedido otra oportunidad para formar una familia con ella.

Aunque, aparentemente, Süreyya ha aceptado la situación, ha aprovechado el momento para pedirle un ascenso laboral por la humillación sufrida: "Ser la gerente del club estaría bien".

Yaman, deseando mejorar la situación, ha accedido. Cree que, si Süreyya se siente valorada en su trabajo, su relación podría mejorar con el tiempo, y espera que esto quede finalmente como una anécdota en el futuro.