Francisca se gana a Berta ofreciéndole protección frente a su “hermana”. Así, la chica se aplica en seguir las instrucciones que ha recibido por parte de doña Francisca.
Nicolás no cree a doña Fuensanta, y a pesar de lo afectada que se muestra la expulsa definitivamente de su casa y de su vida.
Prado detecta una especial tristeza en Emilia después de la charla con su suegra.
Además, Hipólito y Onésimo recapitulan lo que saben sobre Abel pero acaban tomándolo casi por el pito del sereno.