Sara logra sacar a Marcial de su terrible bloqueo. El galeno salva al Chato que debe quedarse descansando secretamente en la habitación de la inglesa. Así pues, Sara debe evitar que nadie en la posada le vea. Antonio reconoce ante Olmedo que le echaron del ejército por ser un violador y, efectivamente, él atacó a Eugenia. Pero le exige que no diga nada o hundirá su carrera.

Los Pérez juntan sus ahorros con la esperanza de que Carmen pueda estar en Sevilla cuando trasladen a Roberto. Margarita visita a Eugenia, que está muy enamorada de Antonio Villa sin sospechar, obviamente, que está a punto de lanzarse a los brazos de un asesino violador.