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Joyas, viviendas o participaciones empresariales: el patrimonio embargado de los padres de Joaquín Torres

En Y ahora Sonsoles hemos accedido en exclusiva al patrimonio que ha sido embargado de los padres de Joaquín Torres tras la mala gestión de su hijo menor, Julio, que se encuentra en pleno conflicto con el arquitecto, que está tratando de recuperarlo todo.

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En Y ahora Sonsoles hemos accedido en exclusiva a las demandas cruzadas de los padres de Joaquín Torres contra su hijo Julio por quitarle los bienes, unos documentos que nos han pedido conocer el patrimonio familiar, valorado en cientos de millones de euros.

Joyas, cuadros, un yate, dos pisos, un chalet de diseño y multitud de inversiones empresariales: una familia que ha pasado de tenerlo todo a vivir en la ruina.

Un patrimonio que ha sido embargado de los padres de Joaquín Torres tras la mala gestión de su hijo menor, Julio, a lo que hemos accedido en exclusiva.

En primer lugar, un impresionante chalet valorado en 12 millones de euros y ubicado en una exclusiva zona residencial de Madrid, que consta de 2.800 metros cuadrados distribuidos en tres plantas.

Las paredes de esta espectacular vivienda albergan la colección de arte de Juan Torres, de la que se prefiere no dar cantidades.

Seguidamente, está el yate de 24 metros de eslora valorado en 20 millones de euros, además de dos oficinas en el barrio de Salamanca, tasadas en 8 y 5 millones de euros respectivamente.

Además, disponían de extensos terrenos en la provincia de Málaga con valor de 1 millón de euros, así como huertos solares cuyo importe sobrepasa los 2 millones.

En una decisión arriesgada, por otro lado, los padres de Joaquín Torres invirtieron 20 mil

lones de euros en negocios en México.

Las participaciones empresariales de Juan y Joaquina eran muy diversas: una planta de biocombustible con valor superior a 20 millones, contratos de arrendamiento con la Cubierta y la plaza de Toros de Leganés por 14 millones, participaciones en oficinas de la Moraleja y una planta eólica en Cuenca tasada en 30 millones de euros.

La suma de estos activos inmobiliarios supera los 250 millones de euros, todos ellos vendidos por Julio Torres. Pero eso no es todo, también hay deudas que abarcan tanto préstamos bancarios como hipotecarios por valor de más de 25 millones de euros. Un total aproximado, ya que muchos activos están sin tasar, de 300 millones de euros.

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