Más detalles con Roberto Brasero
Cataluña vive su peor sequía y amplía las restricciones al 80% de la población: "A veces dan ganas de llorar"
La comunidad ha aplicado medidas para paliar la sequía, unas restricciones que tendrán que ampliarse a otras comunidades si la situación no cambia. Además, hemos estado en Cabrera d'Anoia, uno de los pueblos más afectados por estas nuevas normas.
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La sequía está llegando a su peor extremo en Cataluña y las restricciones de agua se han ampliado al 80% de la población. Esta situación, si no cambian las cosas, amenaza con extenderse a otras comunidades de España.
Roberto Brasero ha estado en 'Y ahora Sonsoles' y ha explicado que las medidas consistirán en tener fuentes apagadas, duchas en menos de 3 minutos con 200 litros por persona al día.
En la agricultura y la ganadería también está restringido el uso de agua y las multas ascienden a los 14.000 euros.
"A veces hasta te dan ganas de llorar"
Sin embargo, la situación puede extenderse y las próximas comunidades que están en riesgo de tener que recurrir a la misma medida extrema que Cataluña son la región de Murcia, que lo está pensando para el mes que viene, así como Andalucía.
Para paliar la sequía, es necesario que llueva, algo que no va a ocurrir este fin de semana, pues predominará el sol. Eso sí, se espera que cambie el tiempo la semana que viene.
Una de las localidades catalanas más afectadas
Cabrera d'Anoia es un pueblo cercano a Barcelona conocido por sus cascadas, y ahora es también uno de los más afectados por las restricciones a causa de la sequía.
Allí hemos podido ver cuál es la realidad de los vecinos que, además, llevan años haciendo frente a fugas que hacen que el agua se pierda y no llegue a las viviendas. "Se aprovecha un 20.30% del agua que se extrae", ha explicado uno de los vecinos.
A las ocho de la tarde, debido a las restricciones, les cortan el agua y no podrán tener hasta las nueve de la mañana. Los padres de Asun tienen 95 años, por lo que su situación es más complicada porque están siempre en casa. "Se vive mal sobre todo por la noche", ha dicho.
Monserrat, con 95 años, ha dejado claro que es muy triste y que no se puede duchar porque no hay agua. "A veces hasta te dan ganas de llorar", ha dicho.
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