Gato por liebre
Boticaria García explica la nueva práctica de cambiar los ingredientes de los productos para hacerlos más baratos
Los supermercados venden productos a menor precio porque cambian algunos componentes para bajar el coste, una práctica legal siempre y cuando los fabricantes lo indiquen en el envoltorio con alguna que otra condición.
Para ir a la compra cada vez hay que estar más atento a lo que compramos y, por supuesto, mirar las etiquetas con lupa. Y es que hay productos que creemos que son iguales, pero mucho más baratos, y esto tiene una explicación.
Hay algunos, por ejemplo, el chocolate o el helado, que nos lo venden como tal, pero en realidad tienen menos calidad que la que nos ofrecen.
El truco está en que cambian los ingredientes, lo que provoca que, además de ser más baratos, sean de menor calidad.
Ocurre, por ejemplo, en el chocolate, que debe tener un mínimo de un 35% de materia seca, un 14% de cacao seco desgrasado y un 18% de manteca de cacao, según ha explicado Boticaria García.
Para hacerlo más barato, han sustituido la manteca de cacao por aceite de palma, que es menos costoso.
También ocurre con el helado, en el que la materia grasa y las proteínas tienen que ser de origen lácteo, pero como es más caro se sustituye por grasas vegetales.
En cuanto a la legalidad de la práctica, se puede llevar a cabo siempre y cuando el fabricante advierta de ello con una letra que no sea inferior al 75% del tamaño de la denominación.