Crimen arma blanca
El hombre asesinado en Toledo es primo hermano del preso fugado en Aranjuez: "El barrio es un polvorín"
El crimen por arma blanca de un hombre de 31 años en Toledo ha conmocionado al barrio del Polígono, en Toledo. La Policía acudía con el presunto asesino hasta su domicilio y se encontraba con una masa de vecinos enfurecidos. El inspector de Policía Serafín Giraldo aporta nuevos datos sobre el caso.
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Un joven de 31 años ha sido asesinado por arma blanca en la madrugada del domingo en Toledo. El crimen se produjo en el barrio toledano del Polígono. Tras la agresión, la víctima intentó llegar al centro de salud gravemente herido pero terminó falleciendo en la puerta del centro sanitario a causa de la pérdida de sangre masiva que había sufrido.
El presunto asesino tiene 36 años y fue detenido a las pocas horas en su domicilio. Los vecinos señalan que es un chaval aparentemente normal que acudía a la zona a sacar a los perros.
Tan solo horas después del suceso la Policía se personaba en el barrio del Polígono con el presunto autor del crimen. Los agentes acompañaban al detenido a su domicilio en busca del arma blanca que había causado las heridas a la víctima.
Cuando la Policía llegó al barrio decenas de vecinos estaban esperando al detenido al grito de "asesino". Los allí presentes no pararon de increparle e incluso le arrojaron algún objeto. La tensión fue en aumento hasta que finalmente los agentes se veían obligados a emplear armas de fogueo para dispersar a la masa enfurecida.
Apunta el inspector de Policía Serafín Giraldo que todo apunta a que estaban bajo los efectos de las drogas y que además ambos se podían dedicar al trapicheo. Confirma además que hay relación de parentesco directo entre el hombre que ha sido asesinado y el preso que se fugó desde los juzgados de Aranjuez. El fallecido es primo hermano del huido, sobre el que pesa un delito de homicidio.
Hasta 4 agentes resultaron heridos en los altercados. En la conducción del detenido al furgón policial hubo una lluvia de piedras, botellas y adoquines.
"La gente quería invadir la zona para llegar hasta el detenido"
Cuenta Sandra que fue testigo directo de los hechos desde su domicilio. "Había un montón de personas y cada vez iban viviendo más furgones policiales. Los agentes se preparaban para ir avanzando y alejar lo máximo posible a las personas, que querían invadir la zona para llegar al detenido. Los policías les iban alejando poco a poco y cuando estaban lo suficientemente alejados le bajaron", relata.
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