Su padre, Raúl Jiménez, está en el paro. Su madre, María José Martínez, se recupera de un infarto cerebral que sufrió el pasado mes de noviembre, y que le ha afectado el lado derecho del cuerpo. Viven en Bailén, en Jaén, en el tercer piso de una casa sin ascensor. Tres pisos que se convierten, cada día, en una odisea. Por eso buscan ayuda para comprar una silla elevadora que le permita al pequeño Raúl acceder a su vivienda.

La Asociación Síndrome X Frágil está recogiendo tapones para ayudales a conseguir esa silla elevadora. Sobreviven con los 400 euros que cobra Raúl de ayuda a la dependencia y todo el pueblo de Bailén está con ellos.

Hemos contactado con Luis García en Boston donde se encuentra cuidando de su hija Aitana, una niña a la que acaban de operar para reconstruir y fabricar las venas del pulmón izquierdo. Luis ha conseguido mover a más de 13 millones de personas y recoger  800 toneladas de tapones con los que se está pagando las operaciones de Aitana. Luis ha sido el encargado de darle la gran noticia a los padres de Raúl: "La Asociación de Aitana, Tapones Solidarios para Una Vida va a pagar la silla elevadora que necesita Raúl". Además, la empresa de salvaescaleras ThyssenKrupp  ha ofrecido a un precio de coste y se compromete a instalarla y hacer el mantenimiento de forma gratuita de por vida.

Asimismo, Bertín Osborne, quien conoce de primera persona el caso de Raúl porque el está sufriendo el mismo caso en su hijo Kike. "Hay que dediarle 8 horas de rehabilitación todos los días, yo me comprometo a darles las pautas a seguir para que lo consigan. Tenéis que trabajar todos los días. El problema de Raúl está en la cabeza, no en sus piernas".