¿Por qué en mi barrio hay 15 grados más que en el tuyo?

A las 7.30 de la mañana el termómetro marca 31 grados en la madrileña Plaza de Lavapiés. No es un medidor cualquiera. El observador es Máximo Florín, profesor de Tecnología del Medio Ambiente de la UCLM. Máximo es un estudioso del calor y se ha coordinado con 150 vecinos de distintos barrios de Madrid para observar el comportamiento de la temperatura ahora que comienza la segunda ola de calor del verano. Lo han llamado "Termometrada": vecinos armados con termómetros y paraguas.

A las 7.30 de la mañana en otro lugar de la zona Oeste de Madrid (mismo día, misma hora) el termómetro de uno de esos vecinos interesados por el calor marca 16 grados. 15 menos que el de Máximo.

Diferencia térmica entre dos barrios de la misma ciudad

¿Cómo puede haber una diferencia térmica tan notable entre dos barrios de la misma ciudad? La distancia entre ambas zonas no llega a 10 kilómetros, pero a las 7.30 de la mañana es la que separa el paraíso del infierno.

Los factores son diversos pero lógicos. En la céntrica plaza apenas existen árboles, el suelo es de hormigón y el tráfico intenso. En el barrio del Oeste, cercano a la casa de Campo, el paisaje no puede ser más distinto. Esos 15 grados de diferencia a primera hora de la mañana se irán haciendo más insoportables a lo largo del día en esta ola de calor que nos llevará a los 45 grados en algunos puntos del Sur de la península.

Máximo ha coordinado este estudio vecinal armado con un sencillo termómetro de alcohol colgado de un paraguas negro. Es la forma más práctica de medir la temperatura: a 2 metros del suelo y sin que la luz del sol incida directa en el medidor. Con su estudio sólo pretende incidir en la importancia de hacer las ciudades más habitables y menos parecidas a un termo.