Todo ha terminado de manera feliz. María, de 15 años es una chica rebelde que ya se había fugado de casa por desavenencias con su madre. Pero la última escapada puso en guardia a Manoli, su madre. María vivía con un hombre de 33 años y con antecedentes penales. Se había marchado sin decir nada y después de la tragedia de El Salobral, su madre se temía lo peor. "Han sido cuatro angustiosos meses", confiesa su madre.
Investigamos en la zona y descubrimos que María no se esconde, hace vida pública y la Policía la podía haber localizado en cualquier momento, pues ya tenían la denuncia de su madre. "Lo cierto es que no han hecho demasiado por encontrar a mi hija", se lamenta Manoli en referencia a la actuación de la Policía.
Poco tiempo después asistimos a un emocionado reencuentro entre madre e hija. "Le diría a las niñas que se van de casa, que vuelvan. No te puedes fiar de nadie", dice María. "No llamába a mi madre por miedo de cómo me contestara ella".