Familiares de los ancianos del brote de gastroenteritis en la residencia de Leganés denuncian que bebían agua amarilla de las tuberías

Los familiares de estos residentes denuncian que el agua de las tuberías salía amarilla y que incluso con ese agua se rellenaban botellas de plástico, Por el momento hay 43 personas afectadas, casi el 20% de los usuarios de esta residencia de Leganés. La Comunidad de Madrid asegura que ya se están tomando medidas y que se va a realizar un análisis toxicológico del agua.

María es hija de una de las residentes. Relata que su madre estuvo en el hospital y al día siguiente de su regreso a la residencia tuvo vómitos y diarrea. Acusa al centro de falta de higiene y escasez de personal "aunque la gente que tiene vocación hace lo que puede". Su madre ha pasado la gripe A, el Covid y recientemente se escapó tras dos intentos y consiguió salir a la calle. Estuvo paseando y sufrió "una caída muy mala": "No sabemos cuánto tiempo ha estado tirada en el suelo", señala.

"No sabemos cuánto tiempo estuvo mi madre tirada en el suelo, sufrió una caída muy mala"

Pide que en la residencia se hagan cargo de los internos con una gestión correcta. Cuenta que tuvo a su madre viviendo con ella durante casi 3 años y decidió llevarla al centro al no poder hacerse cargo de la situación.

Desde la residencia Parque de los Faroles, en Leganés, apuntan que están llevando a cabo una investigación epidemiológica para determinar cuál ha sido el origen del brote.

Carmen López es presidenta de la asociación por los derechos de los mayores. Asegura que hay residentes hospitalizados. Cree que está fallando la colaboración pública y privada en este centro. Es una residencia pública de gestión privada que se licita a quien oferta lo más barato. Esto produce que "la administración se ahorra un coste y en las plazas concertadas el precio ha subido y eso nos da una idea de lo que se ahorra la administración".

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