Dos octogenarios recuperan su dinero invertido en preferentes

Fue en el año 2009 cuando las participaciones preferentes dejaron de comercializarse como producto complejo. Los bancos optaron por captar pasivos con ellas y sus emisiones eran masivas. Sólo ese año las entidades financieras recaudaron cerca de 13.000 millones de euros con ellos. Se comercializaban como depósitos bancarios tradicionales que garantizaban su devolución además de una rentabilidad adicional que podía ser incluso de dos dígitos. Dos años más tarde, en 2011 sale a luz el escándalo estas participaciones. Se vendieron engañosamente a inexpertos, personas enfermas, ciegas y analfabetas como acciones preferentes para los clientes importantes.

Sisinio invirtió 95.000 euros. Sus ahorros de toda lavida trabajando como albañil. Cuando se percató del engaño denunció por estafa a su caja de toda la vida y ahora una sentencia le devuelve su dinero. Los ahorros de Urbano también están atrapados en las preferentes a pesar de que a penas sabe leer y escribir. Cuando le entrevistamos hace un mes salieron a la luz los correos electrónicos del expresidente de su caja de toda la vida, Miguel Blesa en los vanagloriaba de lo bien que se vendían estas participaciones a pesar decía de que estaban engañando a los clientes.

Ambos están pendientes de recibir el dinero que les pertenece pues la sentencia no solo obliga a la cja a devolverles todo el dinero, sino que además tiene que abonarles los intereses.