Crisis PSOE

El exministro Cosculluela, último del PSOE en negar su voto al partido, tras el ingreso de Cerdán en prisión: "Señor Sánchez, por favor dimita"

Al actual Partido Socialista que lidera Pedro Sánchez no dejan de crecerle los críticos, destaca que ocurra entre sus propias filas. El último en pronunciarse ha sido el exministro de Obras Públicas y Urbanismo, Javier Sáenz de Coscuella.

Javier Sáenz de Cosculluela

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Javier Sáenz de Cosculluela concedía una entrevista a Espejo Público en la que manifestaba públicamente su completo desacuerdo con la actual cúpula del Partido Socialista, mermada tras la decisión del juez del Tribunal Supremo de enviar a Santos Cerdán a prisión.

El que fuera ministro de Obras Públicas y Urbanismo bajo la presidencia de Felipe González, dejaba clara su postura abiertamente contraria desde el primer momento. En un tono tan sosegado como claro y contundente, respondía a la pregunta de Susanna Griso de si dará su voto al PSOE en las próximas elecciones generales: "Es muy probable que si el candidato es Sánchez, yo vote en blanco".

"Señor Sánchez, por favor, dimita"

Al mismo tiempo aseguraba que es una decisión que tendrá que meditar, y sobre la que tiene esperanza de no verse forzado a tomar: "Espero no tener que tomar esa decisión. Espero que el señor Sánchez haga un servicio a España y al Partido Socialista, y acabe con este calvario y dimita. Sería lo razonable".

Después de negarle el voto, como ya hicieron Felipe González o Tomás Gómez, Cosculluela enviaba un mensaje directo al actual presidente del Gobierno insistiendo en su visión de que actúe en beneficio del país: "Señor Sánchez, por favor, dimita".

"Esa frase es una tomadura de pelo"

En aras de una regeneración del Partido Socialista que Cosculluela considera vital para la formación por la que trabajó largos años, aba a entender el exministro que el PSOE ha dejado de ser ese "instrumento para la sociedad española" beneficioso para la democracia. Cree que la salida de Sánchez del PSOE permitirá al partido "recuperarse y realizar lo que es propio de un partido socialdemócrata".

Sobre las palabras de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, que negaba que Santos Cerdán tuviera "nada que ver" con el PSOE, el exministro socialista se pronunciaba con el mismo nivel de contundencia: "Esa frase es una tomadura de pelo".

"Absolutamente un problema del Gobierno"

Sáenz de Cosculluela

"Sants Cerdán no solamente es una persona que se ha infiltrado en el Partido Socialista, como si fuera un atracador y los demás fueran víctimas", expresaba Sáenz de Cosculluela antes de contradecir a Montero y sentenciar que este "es un problema del Partido Socialista y del Gobierno de España".

"Yo no creo al señor Sánchez cuando dice que no sabía nada"

"O lo sabía, o era un poco tonto"

Cosculluela, exministro de Obras Públicas

Si dada la situación actual proceden unas elecciones generales o el paso a un lado de Pedro Sánchez y que éste sea sucedido por otra persona que asuma el mando del Gobierno de coalición, se limita a insistir en la necesidad primordial de la dimisión del presidente y lo argumentaba así: "Ha estado varios meses viajando con Koldo, Ábalos y Cerdán y dice que no sabía nada. Una de dos, o sabía, que es lo probable, o entonces era un poco tonto, que no se dio cuenta".

Considera "absolutamente improbable"que el presidente del Gobierno desconociera completamente los hechos por los que se investiga a quienes fueran su mano derecha en el partido, uno tras otro. Seguidamente extendía esa responsabilidad a otros miembros del Gobierno: "Nadie ha abierto el pico. Es intolerable".

Un deseo antes de morir

El exministro de Obras Públicas llega a calificar de "lacayos" a los diputados del PSOE, de los que subraya el hecho de no haberse pronunciado ni mínimamente críticos "con ni un solo aspecto de la acción política marcada por Sánchez y sus ministros". Las excepciones son contadísimas y suponen un contrapeso esencial para una buena salud democrática, a su entender: "Han preferido dormir en la sombra".

El pesimismo lleva Cosculluela a manifestar una suerte de última voluntad, como también hizo el expresidente de Aragón socialistaJavier Lambán: "A mis 81 años me gustaría morirme, cuando me toque, viendo un Partido Socialista reconocido, digno, respetado".

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