James Gandolfini: muere el actor pero sigue vivo Tony Soprano

James Gandolfini tenía tan solo 51 años cuando ha fallecido de un ataque al corazón en Italia, quizás lo más poético de su muerte y que mayor vinculación tiene con el mítico personaje y patriarca de la familia Soprano.

En ocasiones es difícil separar al actor del personaje y en el caso de James Gandolfini era completamente imposible desligar a Tony del extraordinario intérprete que le dio vida durante 86 capítulos. El actor italoamericano no sólo interpretó de manera extraordinaria un personaje tan complejo, sino que le dotó de vida más allá de lo que figuraba en el guión. Lo hizo real, palpable por lo espectadores. Familiar incluso.

Resulta complicado destacar un solo momento que resuma cómo era la personalidad de Tony Soprano, pero es evidente que la mayoría de escenas que resumen su esencia se encuentran en la consulta de la doctora Melfi. Ambos compartieron diálogos brillantes, miradas cómplices y una relación psiquiatra paciente que ninguna serie ha vuelto a reproducir ni de lejos.

Gandolfini estuvo nominado en las seis temporadas que duró la serie (qué menos) y obtuvo tres estatuillas. Una suerte que también tuvo su compañera de batallas Edie Falco (la inolvidable Carmela).

Se ha muerto el actor pero la serie pervive con los años y si cabe con mejor salud que cuando se estrenó. La mediocridad de muchas ficciones posteriores confirma que el reinado incontestable de la mejor serie que se ha hecho hasta el momento. En ‘Los Soprano’ se juntaron los astros y todos los elementos artísticos y técnicos disfrutaron de una supremacía nunca vista hasta el momento y desde luego, tampoco después.

Desde el impresionante y perfecto piloto hasta el final de la serie, del que todavía algunos nos estamos recuperando, James Gandolfini mantuvo una interpretación sincera, total, apabullante. Un lujo para el espectador, una lección magistral sobre cómo dar vida a un personaje. James Gandolfini es Tony Soprano y Tony Soprano es James Gandolfini. Imposible dividir, imposible olvidar.