RECUPERANDO SU SUAVIDAD
¿Cómo limpiar una alfombra de pelo sintético y que vuelva a estar mullida como cuando la compraste?
Las alfombras de pelo largo sintético necesitan limpieza, aunque parezca ser complicada de limpiar la suciedad que tienen. Con algunos trucos, podemos hacer que vuelvan a estar tan mullidas como el primer día.
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Las alfombras de pelo largo sintético son comunes en hogares con mascotas o niños pequeños, ya que son duraderas y fáciles de mantener. Sin embargo, es importante limpiarlas regularmente para evitar que se acumulen la suciedad y los pelos.
Pero, limpiar las alfombras de pelo sintético puede ser una tarea tediosa. Con el tiempo, la suciedad y el uso pueden hacer que se apelmacen y pierdan su suavidad original. Sin embargo, hay algunos trucos que podemos usar para que vuelvan a estar tan esponjosas como el primer día.
Lo primero que debemos hacer es pasar la escoba. Esto ayudará a eliminar la suciedad superficial, como el polvo y los pelos sueltos. El aspirador no es la mejor opción para limpiar alfombras de pelo sintético, ya que puede dañar las fibras. Además, el aspirador no llega a todos los rincones, por lo que es posible que queden restos de suciedad.
Después de pasar la escoba, podemos sacudir la alfombra al exterior. Esto ayudará a eliminar la suciedad más incrustada y a airearla. En caso de que esté muy sucia, podemos utilizar un limpiador específico para alfombras de pelo sintético. Es importante evitar dañar la alfombra.
Para limpiar las alfombras en seco, espolvorea bicarbonato de sodio por toda la superficie. Después, deja que el bicarbonato repose durante unas horas para que absorba la suciedad. Luego, retira el bicarbonato con un cepillo y sacude la alfombra para eliminar los restos.
El bicarbonato es un producto natural que tiene propiedades absorbentes. Al espolvorearlo por la alfombra, este atraerá la suciedad y la grasa, dejando la alfombra limpia y fresca. La limpieza en seco es una buena opción para limpiar las alfombras de pelo sintético de forma regular ya que es sencilla y efectiva y no requiere el uso de productos químicos agresivos.
Para limpiarlas en profundidad, solamente es necesario utilizar agua y jabón. Primero, humedécela con un pulverizador lleno de agua. A continuación, mezcla amoniaco y jabón suave en un recipiente. Aplica esta mezcla sobre la alfombra con el pulverizador, teniendo cuidado de no mojarla demasiado.
Luego, deja que la mezcla repose durante un par de horas para que actúe de manera efectiva. Después, enjuaga la alfombra con un paño húmedo y el pulverizador hasta que elimines todos los residuos restantes de jabón y amoniaco. Por último, deja que se seque por completo para volver a colocarla.
Siguiendo estos consejos, podrás mantener tus alfombras limpias y bonitas durante muchos años.
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