Tres sitios de Madrid en los que hay que hacer cola para comer, ¿merece la pena?

Las colas no nos gustan. Es un hecho. Ante la visión de una larguísima hilera de personas para ir a dónde sea, solemos venirnos abajo y abandonar. En el caso de los restaurantes, bares y cafeterías, pasa lo mismo. Afortunadamente, en la mayoría es posible reservar mesa. Pero luego están los que no admiten reservas y que, además, tienen una gran demanda. En estos no quda otra que esperar pacientemente. En Madrid hemos localizado algún lugar con este patrón. Te decimos cuáles son...

Qué: Nakeima

Dónde: Meléndez Valdés, 54.

¿Qué sirven? Cocina que fusiona técnicas asiáticas, latinas y españolas con producto de primera. Sus callos thai, sus nigiris sorprendents o sus platos con lamprea gallega son de otro mundo y han creado un parroquia fiel que acude a dejarse sorprender con una alta cocina de barra que nunca defraude.

¿Por qué hay cola? Porque, en cada servicio, solo entran una veintena de personas que pueden permanecer dentro el tiempo que deseen. Aunque salga alguien, no entra nadie más. Esto hace que, especialmente en fin de semana, haya que estar ante su puerta una hora (o dos antes) para garantizarse un lugar en alguno de sus taburetes.

¿Merece la pena? Indudablemente, sí. El ticket medio anda en torno a los 50 euros y es una experiencia de altísimo nivel gastronómico. Además, es una experiencia muy divertida gracias al trasiego constante de cocineros y camareros, la selección musical y el ambiente especial que se crea.

Qué: Cereal Hunters

Dónde: Mejía Lequerica, 14

¿Qué sirven? Es básicamente una cafetería donde se sirven cereales. Tienen más de un centenar de variedades para acompañar con sus bebidas lácteas. Todo esto en un entorno que apela a la cultura pop y a la nostalgia para captar a los milennials. La decoración la componen fotos de series como Friends o películas como Matilda. Los boles de cereales oscilan entre los 2 y los 4 euros.

¿Por qué hay cola? Este formato está haciendo furor y, a la hora de la merienda, especialmente en fin de semana, hay colas de grupos de jóvenes que deciden trasladar a un local del centro de Madrid lo que hacen habitualmente en el sofá de su casa. Para los que no quieran hacer cola, una recomendación: ir por la mañana, cuanto más temprano mejor.

¿Merece la pena? Para todos los que sienten nostalgia de su niñez y adolescencia, sin duda. De todos modos, Cereal Hunters dispone de otra sucursal en el 90 de la calle Alcalá y pronto abrirán un tercer local en la calle Reina, paralela a Gran Vía, así que es posible diversificarse para evitar hacer cola...

Qué: La Pecera

Dónde: Velarde, 2.

¿Qué sirven? Helados en un cucurucho de estilo japonés que se llama taiyaki. Es una especie de gofre con forma de pez -de ahí su éxito- que se rellena con Nutella o mantequilla de cacahuete. Ahí dentro se sirve el helado, que no va en bola sino en crema suave, y con sabores que van desde el chocolate al té matcha.

¿Por qué hay cola? Ha sido el verano de la fiebre heladera y estos se han llevado la palma. Además, son carne de Instagram. ¿Quién no querría una foto posando con una cosa tan cuqui como son estos pececitos? El precio va de los 3,5 a los 4,5 euros, dependiendo de toppings y demás.

¿Merece la pena? Sí, porque realmente está bueno. Además, es posible añadir un montón de toppings. Podríamos decir que es un híbrido casi perfecto entre el helado y el gofre.