NO SIGAS HACIÉNOLO
Encrespamiento, pelo sin brillo o dañado: errores que seguro cometes y que más dañan tu cabello
Aunque lavarse el cabello con agua caliente, secarlo frotando con la toalla o hacerse peinados tirantes son acciones muy comunes, no significa que sean adecuadas. Estas prácticas pueden dañar la fibra capilar y la cutícula, debilitando el cabello.

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Aunque no lo creamos, el cabello no solo se cuida con champús y mascarillas; es más delicado de lo que parece y, muchas veces, se cometen errores por seguir pasos habituales pero incorrectos. Hay que tener en cuenta que el tallo capilar está formado por queratina, la proteína que le da fuerza al pelo, y que no tiene células vivas, lo que significa que, cuando el cabello crece con las puntas quemadas, no puede repararse a sí mismo.

Por eso, es importante evitar acciones que lo dañen. Usar demasiado champú elimina los aceites naturales que protegen el cuero cabelludo; incluso lavarlo todos los días puede hacer que se debilite y se ensucie antes de lo previsto. Del mismo modo, aplicar acondicionador en la raíz deja un efecto graso, mientras que aclarar con agua muy caliente abre en exceso la cutícula, haciendo que el pelo pierda humedad.

Cuando lo seques, no lo hagas con aire muy caliente ni demasiado cerca de la cabeza, porque puedes quemar la capa externa (sí, de nuevo, la cutícula), y la consecuencia será un cabello áspero y sin brillo. Como ves, las altas temperaturas nunca fueron buenas.
Por supuesto, la segunda alternativa no es frotar con la toalla: así solo generarás frizz y encrespamiento, además de romper la fibra capilar, ya que el pelo mojado es más frágil. Lo ideal es aplicar un protector térmico y ajustar la temperatura del secador. Al usarlo, mantenlo a unos veinte centímetros de la cabeza.
Si sueles tener prisa y, como solución, recurres a los famosos clean looks la mayoría de los días de la semana, podrías provocar alopecia por tracción, ya que el pelo se rompe al estresar el folículo capilar. Las consecuencias pueden ser graves, pues el cabello podría dejar de crecer fuerte y sano durante mucho tiempo. Además, al deshacer el peinado para su posterior lavado, se puede producir una caída alarmante. A todo esto se suman los tirones, las irritaciones y el dolor.

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