¡No tires las cáscaras de huevo! 3 ideas muy prácticas para aprovecharlas fuera de la cocina

El huevo es uno de los alimentos que más se consumen en una casa. Contiene nutrientes que le aportan importantes beneficios al organismo, y puede prepararse de diferentes maneras. Pero también podemos utilizar el huevo, o más bien su cáscara, para otras facetas del hogar. Atenta, porque te vamos a explicar algunos de los usos más curiosos de la cáscara de los huevos.

Uno de los usos más conocidos de este producto es que es un perfecto abono orgánico para plantas. Lo único que has de hacer es triturar las cáscaras de huevo y esparcirlas por la maceta de tu planta favorita.

Por otro lado, es un producto formidable para recuperar el blanco de tu ropa. Aunque suene un poco extraño, ayuda a complementar los efectos del detergente para dejar los blancos relucientes. Tan solo debes triturar cáscara de huevo e introducirla en una bolsa hecha con gasas. Pon la bolsita con cáscara de huevo en el interior de la lavadora e inicia el ciclo de lavado habitual.

Por último, puede ser un exfoliante corporal formidable. La textura que tiene la cáscara de huevo al molerla favorece a la eliminación de células muertas e impurezas de la piel. Aplasta la cáscara de huevo hasta conseguir un polvo uniforme. Luego, mézclalo con una clara de huevo. Ahora mezcla el preparado con una cuchara de miel. Aplícalo en la zona que quieras exfoliar, pero debe estar bien limpia antes. Déjalo secar durante 30 minutos y aclárate con agua.