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IDEAL PARA FOODIE-SELFIES

Todavía no lo sabes, pero quieres visitar este museo del helado

Tras su exitoso paso por Nueva York, el Museo del Helado se instala en Los Ángeles. A medo camino entre el arte pop y el parque de atracciones, este espacio cuenta con una piscina de anisetes de colores, un balancín-cuchara heladera, un columpio en forma de sándwich de nata o la sala dedicada al chocolate. Temblad, amantes del selfie.

En el museo del helado

En el museo del heladoMuseum of Ice Cream

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Los Ángeles rebosa de calor, tendencias y cultura pop. Por eso no es de extrañar que el Museo del Helado haya escogido esta ciudad como su segunda ubicación. Después de arrasar en Nueva York el verano pasado, esta deliciosa iniciativa se traslada a la ciudad de las estrellas.

La experiencia, a medo camino entre el arte pop y el parque de atracciones, parece la casa donde se hubiesen mudado Willy Wonka y Katy Perry: un mundo tremendamente dulce e instagrameable hecho de colores pastel, globos de helio comestibles y helado de todas las formas imaginables.

La estrella absoluta es la piscina de anisetes de colores (marco oficial para los selfies de los visitantes) pero también triunfan el balancín-cuchara heladera, el columpio en forma de sándwich de nata o la sala dedicada al chocolate. ¿Quién es capaz de resistirse a los iconos pop y los fondos rosa chicle? Lo quieres en tu perfil, y lo sabes.

¿Quién no querría darse un selfie-chapuzón?
¿Quién no querría darse un selfie-chapuzón? | Museum of Ice Cream

Si funciona tan bien como en la gran manzana, las colas están aseguradas. En Nueva York la iniciativa tuvo defensores y detractores –hubo quien criticó que el proyecto dejaba demasiado espacio a las marcas, y que la visita guiada apresuraba a los visitantes a hacerse la foto e irse-, pero fue un éxito rotundo. Los 30,000 tickets disponibles se agotaron en apenas cinco días, y en reventa llegaron a pagarse a 100 euros (el precio normal eran 15).

A eso hay que sumar una sustanciosa gama de merchandising, el patrocinio de varias marcas de helado y el de una conocida aplicación para ligar. Detrás del proyecto está una pareja -diseñadora creativa ella, ex ejecutivo de banca de inversión él- apasionados del arte y de la tecnología, y habituales de la vida social de Manhattan, que han sabido explotar al máximo el fervor colectivo por las redes sociales y el atractivo indiscutible del onirismo empalagoso.

Conos de helados convertidos en lámparas
Conos de helados convertidos en lámparas | Museum of Ice Cream

Pero tranquilo: si no te dan los ahorros para coger un vuelo al otro lado del atlántico, debes saber que en España también tenemos un museo del helado. Está en Alicante y no es tan cool como el de Los Ángeles, pero queda más cerca.

Si no te convence, alguno de estos cuatro museos gastronómicos patrios o este extranjero seguro que te dejan un buen sabor de boca. O, si no, siempre puedes optar por vivir una experiencia gastronómica en el museo, pero sentado a la mesa.

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