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GUíA PRÁCTICA SOBRE LA D.O. DEL 1 AL 10

Somontano para principiantes

¿Qué sabemos de los vinos del Somontano? Seguramente a cualquier aficionado le vienen a la cabeza varias bodegas de Rioja y Ribera del Duero, pero, ¿y del Somontano? Esta guía te muestra sus bondades.

Enate

Las bodegas Enate son parte de la Ruta del Vino Somontano, una joya. Cocinatis

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Es una de las grandes D.O. históricas de España y sin embargo sabemos bien poco de ella, cosa que no deja de ser una pena, ya que el Somontano tiene desde pequeñas bodegas que elaboran vinos ecológicos hasta grandes bastiones históricos de la zona, como es el caso de Enate.

Con Enate precisamente nos pusimos en contacto para que nos ayudasen a elaborar una guía práctica del Somontano, no sin sentirnos un poco Woody Allen cuando decía aquello de “hice un curso de lectura rápida y leí 'Guerra y paz' en veinte minutos. Creo que decía algo de Rusia”. Y claro, su enólogo Jesús Artajona nos regañó. Y aguantamos la reprimenda bajo el argumento de que una zona no puede resumirse en unos cuantos párrafos y de que en realidad la zona es un eslabón más (importante, eso sí) de la cadena de elaboración de un vino”: que hay vinos buenos y vinos mediocres y hay múltiples factores que influyen en ellos independientemente de que los viñedos hayan sido plantados cerquita.

Como le oí decir una vez a Àngel Garcia Petit, eminencia del mundo de la enología, profesor y erudito, como ejemplo máximo de lo loca que está la gente: “hay incluso quien va a un restaurante y se pide un vino de Burdeos”. Porque Burdeos, claro, como el Somontano y en realidad como cualquier zona, es un área amplia y compleja, absolutamente inclasificable, con particularidades climatológicas tan concretas que marcan la diferencia entre un caldo y otro, y que ni siquiera, y en esto coincide plenamente Artajona, logran poner de acuerdo a los expertos.

Dicho esto, nosotros somos de los que creemos que más vale leer 'Guerra y Paz' en veinte minutos que no leerla, así que sin perder de vista todas estas consideraciones vamos a pasar a definir, con la ayuda de Enate, los vinos aragoneses del Somontano, que hace poco tuvimos además ocasión de catar en un cóctel celebrado en Barcelona con motivo de la feria Alimentaria.

¿Que como son los vinos de Enate? Artajona tampoco se moja. “Pues tenemos de todo. Desde vinos de mesa modestos y muy correctos, hasta otros mucho más complejos, de un nivel más alto y, por lo tanto, no nos engañemos, más caros”. La cosa más curiosa de este abanico de precios, apunta Artajona, “es que paradójicamente los consumidores solemos ser más exigentes con los vinos baratos que con los caros”.

Vamos allá, pues, con este Somontano del 1 al 10.

1- Al estar al lado de los Pirineos, en el llano del Pirineo de la provincia de Huesca en la comarca de la que toma el nombre, las temperaturas de la zona se caracterizan por los inviernos frescos y los veranos calurosos, con cambios bruscos de temperatura al final de la primavera y del otoño, y por las frecuentes precipitaciones.

2- La D.O fue creada en 1984 y desde entonces ha evolucionado, viendo nacer numerosas bodegas.

3-La zona del Somontano da lugar a vinos muy diferentes entre ellos. De hecho, Artajona insiste en que el vino es algo vivo, de manera que hay mil factores que pueden influir en que una cosecha sea o no estupenda, tanto climatológicos como humanos. Sin embargo, pese a no poder generalizar, podríamos decir que suelen ser vinos con un paso en boca ágil y nervioso.

4- Además de las variedades autóctonas, el Somontano se caracteriza por la fuerte presencia de variedades internacionales. Entre las más destacadas, merlot, chardonnay, pinot noir, cabernet y syrah.

5- Parece ser que el Somontano, al contrario de lo que ha ocurrido en otras zonas vinícolas, no ha sufrido ninguna mala cosecha estremecedora desde sus orígenes. Evidentemente, ha tenido años mejores y peores, pero ninguno nefasto.

6- Entre las mejores cosechas que se recuerdan están la de 1998, 2001, 2005 y 2009. Artajona puntualiza, sin embargo: “no todas las cosechas excelentes dan lugar a vinos excelentes, ni mucho menos”, pues en el proceso, por decirlo llanamente, en que la uva se convierte en vino pueden pasar mil cosas que se escapan a lo puramente climatológico. “Puedes tener una maduración de ensueño, sin lluvias inoportunas (poco más que unos litros por las noches), pero luego cuando esa uva te llega a la bodega tienes que saber extraer lo bueno sin mermar la calidad y sin ponerle atributos negativos”. No siempre se consigue, afirma.

7- Las variedades autóctonas de Somontano, como la moristel, marcan la diferencia en los vinos de la zona, aunque no todas las bodegas profundizan en su uso, dada la gran cantidad de variedades presentes, un total de 15. Entre ellas destacan la garnacha o el tempranillo, que conviven con variedades internacionales como pueden ser riesling o merlot. Artajona nos explica que "el tempranillo es la bandera de vino tinto español en los mercados de exportación. Siempre es un plus leer tempranillo en la etiqueta", mientras que el cabernet sauvignon suele reforzar la carrocería de un vino, dándole fuerza y consistencia. El merlot, por su parte, es una variedad difícil de trabajar en la viña y en la bodega "por su tendencia al corrimiento (mal cuajado del fruto), porque no soporta no llegar a la madurez plena, hay dificultades para realizar la maloláctica, etc. Es, pues, una de las uvas más complicadas pero que, bien trabajada y entendida, entrega toneladas de finura y complejidad a los vinos en los que participa".

La chardonnay, continúa Artajona, "es la uva blanca 'globetrotter' por antonomasia. Presente en casi todos los países que cultivan la viña, es una uva versátil y de fácil implantación. ¿Y qué decir de variedades como la impronunciable gewürztraminer o la elegante syrah? "La primera es el perfume del Somontano y de las zonas en las que se cultiva: un abanico aromático con notas de lichís, rosas, piel de mandarina.., mientras que la segunda es una uva que necesita sol y poco estrés hídrico. Bien cultivada, da vinos esféricos y poderosos al mismo tiempo". En resumidas cuentas, una golosina, como el Enate Syrah-Shiraz...

8- La D.O cuenta, hasta la fecha, con 33 bodegas. Algunas de ellas son Enate, Viñas del Vero, El Grillo y la Luna, Laus, Pirineos o Lasierra.

9- La mejor manera de conocer la zona y disfrutar de sus vinos es subirse en el popular bus del Somontano y recorrer las bodegas mientras alguien conduce por nosotros. La Ruta del Somontano se ha convertido, de hecho, en uno de los grandes atractivos turísticos de la zona.

10- Otro gran atractivo turístico, de visita obligada si andamos por allí, es su Espacio del Vino, un museo que se encuentra en Barbastro (Huesca) consagrado a la difusión y promoción de la D.O. Somontano. Aquí podremos realizar cursos de cata, asistir a proyecciones y disfrutar de todo tipo de actividades relacionadas con el mundo del vino de Somontano.

Para acabar la charla, preguntamos a Artajona cuál es su vino favorito de Enate pensando que también nos va a regañar por preguntarle a cuál de sus hijos quiere más, pero es aquí cuando hace acto de presencia la legendaria imprevisibilidad aragonesa: “El Enate Rosado. Fue nuestro primer vino que fue un fenómeno mediático y nos convirtió en una bodega de relumbrón”, afirma sin dudarlo. “Aún hoy sigo enamorado. Es un rosado de Champions League”.

 

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