El mango, una fruta saciante que puede ayudarte a perder peso

El mango es una fruta tropical y exótica que poco a poco se ha ido haciendo más y más famosa en España. Originaria de Asia, es muy común verla sobre todo en los meses de verano, en numerosas recetas y platos de todo tipo: desde helados hasta ensaladas, pasando por batidos y zumos. Además de ser dulce y sabroso, el mango es conocido por sus incontables beneficios para la salud y por sus asombrosas propiedades.

El mango es uno de los alimentos más ricos en antioxidantes por su riqueza en vitamina C y vitamina A, y, junto con la piña, la papaya y el kiwi, es una de las frutas que contienen enzimas proteolíticas, o lo es que lo mismo, que son capaces de digerir las proteínas y aprovechar mejor los nutrientes. Por ello el mango mejora la digestión y depura el organismo, pero también aumenta las defensas y la masa muscular y mejora el aspecto del cabello y la piel, entre otras muchas cosas. Algunos estudios sugieren que su contenido en flavonoides también podría proteger frente a ciertos tipos de cáncer.

Aunque está buenísimo y sus propiedades son muy beneficiosas para el organismo, conviene no abusar del consumo de mango, ya que también es una de las frutas más calóricas y con mayor nivel de azúcar de la naturaleza: una taza de esta fruta contiene 170 calorías y 24 gramos de azúcar. Esta cantidad de fructosa convierte al mango en un alimento ideal si necesitamos energía, pero que debe consumirse siempre con moderación y cabeza.

A pesar de ser rica en calorías, esta fruta tiene un secreto: su poder saciante. Si quieres consumir mango de forma saludable, lo más recomendable es que lo tomes de forma ocasional por las mañanas, en el desayuno. Su poder saciante (debido a su contenido de fibra) puede incluso hacerte bajar de peso –ya que hará que no tengas hambre en toda la mañana y que no picotees-. Además, el mango te aportará toda la energía que necesitas para rendir al máximo durante todo el día.

¿Cómo usar el mango en la cocina?

El mangose puede comer solo o acompañadode otras frutas, aunque también combina muy bien en ensaladas y postres, tanto calientes como fríos. Es común aprovechar el mango para elaborar salsas y jugos, que maridan a la perfección con la pasta y con carnes suaves y bajas en grasa y calorías como el pollo o el pavo a la plancha. Es más, si elaboras una receta a base de esta fruta y carne blanca tendrás asegurado el aporte diario recomendado de proteínas.

Al mismo tiempo, el mango se ha convertido en una de las frutas estrella a la hora de preparar los tan famosos smothies y batidos. En general, esta fruta combina bien con otras de sabor y color parecido, como los plátanos, la manzana, la piña, la uva o la naranja. Un batido que incluya mango no solo te resultará sabroso e intenso, si no que te proporcionará energía y hará que tu cuerpo asimile mejor todos los nutrientes que necesita a lo largo del día.