Diez terrazas de Barcelona para sobrevivir al calor (y para todos los gustos)

Puro Beach
Preciosa terraza con piscina, tumbonas, sala de masajes y un comedor al aire libre de color blanco impoluto. Puro Beach se encuentra en lo alto del Hilton Diagonal Mar y es el lugar al que acudir a pasar el día sin prisa, comer alguna propuesta de su cocina saludable, darse un chapuzón entre rascacielos, tomar en sol ante un bol de fruta fresca y acabar con un masajito. Así sí.

Hotel Hilton Diagonal Mar. Taulat, 262.

Jardín Mimosa
El Hotel Mandarin Oriental no sólo cuenta entre su elenco de profesionales con chefs de tanto nivel como Ángel León, Raül Balam o Gastón Acurio, sino que presume de algunos de los espacios más bonitos de la ciudad. Su sofisticada terraza interior de la planta baja, repleta de vegetación, nos hará olvidar que nos encontramos en pleno centro de Barcelona y nos permitirá disfrutar de una carta de snacks y cócteles de gran nivel.

Hotel Mandarin Oriental. Passeig de Gràcia, 38.

The Box Social
Este pequeño patio interior con encanto a raudales, en un edificio antiguo reconvertido ahora en hotel de cuatro estrellas de espíritu 'trendy', es el lugar ideal para una cena íntima (su cocina creativa es más que interesante) o un tentempié a cualquier hora. Y es que pocos lugares como este pequeño patio de mobiliario reciclado y ambiente cool para representar la simbiosis perfecta entre tradición y modernidad.

Hotel Brummell. Nou de la Rambla, 174.

Flax & Kale
Es imposible no amar Flax & Kale incluso sin saber que tiene una de las terrazas más bonitas de Barcelona. Y que además se halla en pleno centro, y que en ella podremos degustar una cocina vegetariana saludable (con algunos platos de pescado) creativa, voluptuosa y muy muy buena. Más 'Sex & The City' imposible.

Tallers, 74.

Windsor
Cocina catalana tradicional revisitada y un edificio señorial en plena Diagonal constituyen, sin duda, un caballo ganador a la hora de elegir terraza. Este precioso espacio modernista, clásico y elegante, cuenta con una preciosa terraza interior, tranquila y agradable, arrebatadoramente bonita, que en los días de verano es el espacio ideal para disfrutar de platos que van desde los canelones a la hamburguesa de vieira.

Còrsega, 286.

Roba estesa
Otra terraza de hotel emblemática en Barcelona es la del Hotel Neri, el único Relais & Chateau de la ciudad ubicado en un pequeño palacete en el corazón del Gòtic. Su azotea, que nos recuerda a las clásicas de la zona en que los vecinos solían salir a tender la ropa –de ahí su nombre– es pequeña y rebosante de encanto y vegetación, íntima, carismática y con unos cócteles deliciosos.

Hotel Neri. Sant Sever, 5.

La caseta del migdia
Y de lo más sofisticado, como Jardín Mimosa, a lo más canalla, como este chiringuito ubicado en lo alto de la montaña de Montjuïc, todo un clásico del verano en Barcelona que hace de su aire informal una bandera. Rodeado de bosque, con vasos y platos de plástico y una oferta de lo más escueta e informal –básicamente carne a la parrilla y patatas chips–, sus miércoles de sardinas y rumba son un clásico de la ciudad.

Mirador del Migdia, s/n.

Palau Dalmases
Frecuentado básicamente por un público guiri, es una auténtica pena que el barcelonés no se haya decidido a pasarse por este espacio bellísimo de la calle Montcada, en el Born, a disfrutar de una copa de vino y un concierto en directo al caer la tarde. El patio del Palau Dalmases tiene magia, y uno es capaz de sentirla nada más poner los pies en ella. Poco más se puede decir.

Montcada, 20.

Caballa Canalla
La terraza de este restaurante ubicado en el interior del Mercat de la Barceloneta es uno de esos sitios que lo tiene todo sin tener nada aparentemente especial. Y es que desde el momento en que ocupamos una de sus mesas y disfrutamos de alguna de las opciones de su carta de tapas, vamos a ser espectadores privilegiados del maravilloso espectáculo que es la gran plaza en la que se encuentra, siempre alegre, ajetreada y frecuentada por personajes variopintos.

Plaça Poeta Boscà, 1.

Salt Beach & Club
En los bajos del W Hotel, en la Barceloneta, encontramos este local a pie de playa, decididamente hipster, en el que una clientela en la que abundan los cuerpos esculturales da cuenta de una cocina de inspiración californiana.

W Hotel. Passeig del Mare Nostrum, s/n.