Descubre estos ocho alimentos que cuidan tu hígado

Las proteínas y las grasas tienen la propiedad de cuidar el hígado, de hacer que esté más fuerte y sano. Ahora bien, no todas las proteínas y grasas son amigas del hígado. Hay que elegir opciones que tengan una acción protectora y eviten la saturación hepática.

Los alimentos que son buenos para el cuidado de hígado se dividen en dos grupos -ya que realizan dos funciones diferentes, pero al mismo tiempo complementarias-: por un lado están aquellos alimentos con propiedades que favorecen la desintoxicación del hígado; y por el otro, alimentos con nutrientes capaces de proteger el hígado, generalmente con un gran contenido de antioxidantes.

Te proponemos algunos alimentos perfectos para cuidar tu hígado:

Proteínas: animales y vegetales
1. Animales
Las carnes blancas, dando prioridad al pollo, el pavo y el conejo, son grandes fuentes de vitamina B12, son capaces de recuperar hepatocitos deteriorados y ayudan a descolapsar el hígado. Lo ideal es cocinarlas sin grasas para conseguir los máximos beneficios para el cuerpo.

Por otro lado, el pescado azul es rico en ácidos grasos, que se encargan de aliviar la sobrecarga y la inflamación del hígado. ¿Cómo cocinarlos? Al vapor o al horno son las mejores opciones.

Los lácteos favorecen a la función hepática gracias a que contienen lactoglobulina y lactoalbúmica.

2. Vegetales
Las legumbres secas son una buena opción para estimular el hígado y hacerlo reaccionar ante el colesterol malo. Además, presentan una gran cantidad de fibra.

Las legumbres frescas son capaces de aliviar la saturación del hígado, gracias a su contenido en hormonas vegetales, minerales y vitamina E. Eso sí, para sacarles todo el partido no debes cocerlas en exceso.

No es nuevo que los frutos secos tienen muchos beneficios, así que para el hígado no iba a ser menos. La ingesta de frutos secos favorece al funcionamiento de las enzimas hepáticas y aseguran un aporte correcto de vitamina B6. ¿Lo mejor? Combinarlos con cereales.

Grasas saludables
Los ácidos grasos esenciales son lípidos poliinsaturados que actúan como protectores para el hígado, evitando su saturación e inflamación.

Los ácidos grasos están presentes, por ejemplo, en el aguacate, las nueces y también en el pescado azul. Para sacarles el máximo partido a estos alimentos lo mejor es tomarlos en el desayuno. De esta forma contribuyen a vaciar la vesícula biliar.

El aceite de oliva virgen extra, en crudo y de forma moderada, es terapéutico para el hígado. Aporta una serie de lípidos básicos que neutralizan las toxinas malas y disminuyen la sobrecarga del hígado.

¿Quieres sacarle todo el partido a este ingrediente? Antes de irte a la cama toma 2 cucharadas de aceite mezcladas con zumo de limón. Estos dos ingredientes ayudarán a tu cuerpo a equilibrar el hígado y la vesícula.

Aceites de sésamo, lino o nuez
Una cucharada rasa en ayunas ayuda a regular los índices de colesterol, ya que este tipo de aceites contienen grasas que no son saturadas y hacen que el cuerpo genere colesterol bueno.