NovaMás» Vida

Generan muchos atragantamientos

Frutos secos y niños pequeños: una mala combinación

Los frutos secos crudos son buenísimos, un alimento súper completo. ¿Es bueno que los coman los niños? Es buenísimo. Pero lleva cuidado si tu hijo aún es pequeño. Son la causa más frecuente de atragantamiento. ¿No lo sabías? Sigue leyendo.

Bebé durmiendo

Bebé durmiendoiStock

Publicidad

¿Los frutos secos son alimentos recomendables?

Obviamente, sí. Son una magnífica fuente de fibra y proteínas vegetales, muy concentrados desde el punto de vista de la energía y además con grasas saludables. ¿Se les puede pedir más? Parece que no. Siempre es mejor introducirlos en nuestra dieta crudos que tostados y obviamente muchísimo más que si los tomamos fritos.

¿Desde cuándo puede tomar un niño frutos secos?

Desde que se comienza con la alimentación complementaria. Sí, igual te sorprende, pero desde los 6 meses podríamos dárselo. Hay un estudio de hace años en el que se dio cacahuete a bebés con predisposición a desarrollar alergia a frutos secos desde los 6 meses y a otro grupo no. El grupo al que se le dio cacahuete de manera precoz generó un fenómeno de tolerancia que hizo que hubiese menos niños alérgicos a largo plazo, al contrario del grupo de niños que se les introdujo más tarde.

Muy interesante, puedes pensar. Pero, ¿cómo se los damos a los bebés? O pulverizados junto con la comida o en forma de cremas sin azúcares añadidos. ¡Nada de trozos hasta mucho, mucho más adelante! Ahora veremos por qué.

¿Creías que le podías dar frutos secos en trozos a cualquier edad?

¡No! Lleva muchísimo cuidado. Por mucho que sean unos alimentos muy recomendables, en trocitos nunca, al menos hasta los 4-5 años, incluso si es más tarde mejor. ¿Por qué? Son alimentos duros y son la primera causa de atragantamiento en niños, hasta un 60-80% de los atragantamientos son debidos a frutos secos en trozos. La estrella: el cacahuete. Puedes pensar que tu hijo de 2 años los mastica sin problemas, que le has enseñado perfectamente. Lleva cuidado, no tengas esa falsa sensación de seguridad, en cualquier momento puede ocurrir la desgracia. Además, a veces ni siquiera tienen todas las muelas aún, que son las que trituran bien los alimentos.

Cuando un niño es alérgico a los frutos secos, lo manifestará en las primeras veces que los coma. Pero el riesgo de atragantamiento no se pasa porque lo haya tomado en algunas ocasiones. Son ideales para que un niño se atragante: pequeños, duros y difíciles de masticar. Una combinación peligrosa.

Maniobra en atragantamiento
Maniobra en atragantamiento | iStock

¿Sólo puede ocurrir con los frutos secos?

No. En general puede ocurrir con cualquier cosa dura y pequeña y, si además es de forma redondeada, más fácil. Así que evita también palomitas de maíz, salchicha dura, salchicha de Frankfurt, semillas o fruta y verdura dura cruda (tipo zanahoria).

Otras cosas que no hay que dejar a su alcance son los juguetes pequeñitos, sobre todo las canicas. Forma redondeada, atractivas y de llamativos colores. Tienen un cartel que dice “cómeme” para los pequeños de la casa.

¿Qué ocurre cuando un niño se atraganta?

Puede ser peligroso e incluso mortal. Piensa que ese trozo de alimento se atascará en la vía respiratoria. En función de a qué altura puede obstruir la entrada y salida de aire de todo un pulmón, ya que las vías respiratorias de los niños son de pequeño tamaño.

¿Qué le notaremos?

Tos, dificultad para respirar, ruidos respiratorios y a veces incluso coloración azulada de la piel o la boca. Si estabais tomando frutos secos, os habéis despistado y vuestro hijo pequeño ha cazado uno y ya no está, acude a urgencias. Lo normal es que no te equivoques.

Si el momento agudo pasa, está unos días sin ningún síntoma y al poco tiempo comienza nuevamente con tos persistente, dificultad respiratoria o fiebre, desconfía. Puede que el objeto que se ha quedado en la vía respiratoria no diese problemas en el momento agudo, pero lo de después por complicaciones.

Como dice el refrán: “Más vale prevenir que curar”. No tientes a la suerte y mantén los frutos secos y cosas que supongan un riesgo de atragantamiento para tu pequeño lejos de él. ¿Qué más podríamos hacer? Conocer primeros auxilios, así que prometo otro artículo, explicando cómo actuar en caso de que la desgracia ocurra.

Publicidad