Consecuencias a corto y largo plazo del estrés en los niños

El estrés es una emoción que está en nuestro organismo para activarse frente a una situación, pero ¿qué ocurre cuando experimentamos estrés de manera continuada? Nuestro organismo no está preparado y comienzan los efectos negativos:

• Problemas cardiovasculares

• Obesidad

• Dificultad para conciliar el sueño

• Mal humor

• Irritabilidad

• Cambios de conducta

Relación entre el estrés y la ansiedad

Ninguna persona puede soportar ese estado de alerta por mucho tiempo. ¿Qué ocurre entonces? Que se puede desencadenar un estado de ansiedad e, incluso, de depresión, afectando al estado de ánimo de la persona y, en este caso en concreto, del niño.

De ahí que sea tan importante reducir el estrés infantil para evitar llegar a tener niños ansiosos y futuros adultos que se acostumbran a trabajar siempre en situaciones de estrés. ¡Hay que aprender a vivir con mucho menos estrés!

Cuando llevar a un niño a un experto por una situación de estrés

“Muchas veces pecamos de esperar que las cosas se solucionen solas, pero ¿hay necesidad de eso? Igual que cuando el pequeño presenta unas décimas de fiebre, rápidamente le llevamos al pediatra, ¿por qué no hacer lo mismo en este tipo de situaciones?”, explica Úrsula Perona. ¡Dejemos atrás los prejuicios sobre la salud mental y actuemos! La mejor curar que hay para todo es la prevención.

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