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Fracaso en el primer lanzamiento espacial del Reino Unido

El lanzamiento se realizó desde un avión a 10.600 metros de altura sobre el Océano Atlántico

Así es VSS Imagine, el primer avión de Virgin Galactic para el turismo espacial con un diseño de ciencia ficción

Así es VSS Imagine, el primer avión de Virgin Galactic para el turismo espacial con un diseño de ciencia ficciónAntena 3 Noticias

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Virgin Orbit trataba de conseguir algo que no se había logrado antes al intentar poner en órbita el primer cohete espacial desde el continente europeo. Solo una decena de países tienen capacidad de poner artefactos en órbita desde su propio territorio.

El primer lanzamiento espacial de Reino Unido falló tras detectar los ingenieros que el cohete presentaba una "anomalía" que no permitía poner en órbita a los satélites.

A través de su perfil en Twitter, la compañía Virgin Orbit comunicó: "parece que tenemos una anomalía que nos ha impedido alcanzar la órbita. Estamos evaluando la información". También que el equipo "ha vuelto sano y salvo a la estación Cornwall" y que compartiría detalles de todo lo ocurrido más adelante.

La misión partía de la ciudad costera de Newquay, en el suroeste de Inglaterra. Para poder poner en órbita el cohete se utiliza un Boeing 747 modificado que le permite transportar bajo una de sus alas el artefacto LauncherOne. "El lanzamiento sufrió una anomalía que nos impedirá entrar en órbita para esta misión", dijo el director de ingeniería y verificación de sistemas de Virgin Orbit durante la transmisión en directo del acontecimiento.

Matt Archer, director de Espacio Comercial de la Agencia Espacial de Reino Unido, explicó que la primera etapa del lanzamiento tuvo "éxito", y que fue "como se esperaba", mientras que la segunda tuvo una "anomalía de algún tipo", "no sabemos qué ha ocurrido, habrá una investigación en los próximos días para resolverlo, pero el cohete no alcanzará la altitud que requiere para desplegar los satélites".

"No sabemos que ha ocurrido", dijo Matt Archer

Este lanzamiento ha creado una gran expectación en el Reino Unido, hasta tal punto que miles de personas se han trasladado a Cornualles, en el suroeste de Inglaterra, para presenciar el momento del despegue.

Este fracaso asesta un nuevo golpe a las ambiciones espaciales europeas después de que una misión del cohete Vega-C, de fabricación italiana, fallara tras el despegue en la Guayana Francesa, en el continente americano a fines de diciembre con dos satélites de observación de la Tierra de Airbus.

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