Violencia vicaria

Una víctima de violencia vicaria se reencuentra con los policías de Valencia que le salvaron la vida hace 20 años

Gravemente herido por su padre, unos policías locales de Valencia, con los que ahora se ha reencontrado, detuvieron al agresor y le salvaron la vida hace 20 años.

Publicidad

Andrés es superviviente de violencia vicaria. Su padre intentó matarlos a él y a su hermano con el objetivo explícito de destruir a su madre de manera cruel y despiadada. Este viernes, este joven de 24 años que oposita para ser inspector de la Policía Nacional ha protagonizado un emotivo reencuentro con los agentes que los socorrieron cuando era pequeño.

"Se puede salir de esto"

Andrés, víctima de violencia vicaria

Era una deuda que tenía pendiente y ahora ha podido cumplir su sueño. Este joven, que tenía cuatro años cuando fue agredido, ha buscado a los policías locales de Valencia que le salvaron cuando su padre amenazó a su madre con quitarles la vida, llegando incluso a herirlos de gravedad, tanto a él como a su hermano. Además, Andrés, como se llama la víctima, ha querido lanzar un mensaje a la sociedad: "Se puede salir de esto".

La brutal agresión tuvo lugar un 29 de agosto de 2002, sobre las 17:00 horas, cuando una mujer se echó encima de un coche patrulla en la céntrica calle Colón de Valencia pidiendo auxilio. Acababa de hablar con su marido por teléfono y le había dicho que iba a matar a sus dos hijos.

"Recuerdo que una mujer abordó a una patrulla en la calle Colón. Sospechaba que su marido estaba intentando lesionar a sus hijos en su domicilio. Encontramos una situación terrible de un padre que estaba lesionando a sus propios hijos", ha comentado el inspector de la Policía Local de València, Antonio Suárez, que coordinó el dispositivo que salvó la vida de los dos hermanos.

“Cuando ocurre algo así piensas que unas personas no van a superar un trauma tan grande, pero te demuestra lo grande que podemos llegar a ser"

Por su parte, la agente de policía local, Raquel Almendros, ha dicho que “cuando ocurre algo así, siempre piensas que unas personas no van a superar un trauma tan grande, pero te demuestra lo grande que podemos llegar a ser”. “Es emocionante, primero porque conseguimos salvarles la vida, después por ver cómo han crecido, están francamente bien a pesar de todo lo que sufrieron”, .

Hasta la central de policía local de Valencia han llegado Andrés y su madre para agradecer y reencontrarse con sus salvadores. La eficaz intervención de los agentes desplazados acabó con detención del agresor y con el rescate de los dos menores malheridos.

Publicidad