El reconocido barítono Borja Quiza (Ortigueira, 1982) ha recibido de sus vecinos de A Coruña un regalo en forma de canción durante el confinamiento por coronavirus. El día que cumplía 38 años se cambiaron los papeles y fue él quien escuchó, sorprendido, cómo desde las ventanas le dedicaban a coro el 'Cumpleaños feliz'.
De esta manera los vecinos quisieron agradecerle que durante esta cuarentena, todas las tardes después de los aplausos de la ocho, Borja Quiza dedique unos minutos a interpretar algunos fragmentos de ópera, con peticiones incluidas, que le han otorgado fama internacional. Quizá reconoce que este cumpleaños no lo olvidará jamás ya que además le dejaron como regalo tres centollos en la puerta de casa.
Todo empezó cuando, para amenizar el confinamiento, aceptó la invitación de cantar desde su ventana y, desde entonces, no ha dejado de hacerlo. Ni siquiera después de que el coronavirus se cobrase la vida de su abuelo Pepe de Antonia, a los 93 años.
El barítono asegura que la cuarentena se vive "con las emociones a flor de piel" y que su principal apoyo son su mujer y sus hijas de nueve y de cinco años. Explica que la gente espera, cada día, que pase "algo bonito" y no les va a defraudar si puede aportar un rato de alegría o motivación.