Desde hace siete años, la vida de Elvira Roda, conocida como la 'chica burbuja', está marcada por el silencio y la penumbra.
Padece sensibilidad química múltiple, una enfermedad ambiental que le obliga a permanecer encerrada en su casa de la Malvarrosa, en Valencia. Cualquier contacto con productos tan comunes como gel de ducha, detergentes, ambientadores o desodorantes podría causarle incluso la muerte. 'No puedo salir de casa ni hacer ningún esfuerzo físico. Paso todo el día acostada', asegura Elvira en una entrevista que ha grabado ella misma.
Sólo sus padres la visitan a diario en su refugio para dejarle la comida, pero ni siquiera pueden tocarla. La familia denuncia que la Seguridad Social no cubre el tratamiento que necesita pues la sanidad española no reconoce esta enfermedad. A todas sus dificultades se suma una más: impedir que el Ayuntamiento de Alboraya fumigue cerca de su casa.
