Juicio Alvia
Una superviviente del accidente del Alvia: "Yo tenía que saltar a la cuneta y allí había bastantes cadáveres"
Sigue juicio por el accidente de tren de Alvia. Han seguido declarando las víctimas del accidente y sus familiares. Allí han contado los momentos tan traumáticos que tuvieron que vivir.
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Este miércoles continúan las declaraciones en el juicio por el accidente del Alvia. Han sido 15 los testigos a los que se han escuchado en la sala y también el familiar de uno de los 80 fallecidos. "Yo tenía que saltar a la cuneta y resulta que allí había bastantes cadáveres... intentaba que no tuviera que saltar encima de ellos", ha relatado una superviviente de la tragedia.
La reclamación por daños y perjuicios asciende hasta los 57,69 millones de euros. En total son 446 personas las que reclaman, agrupadas en 154 acusaciones y asistidas por 110 letrados.
Primera jornada del juicio con la declaración de las víctimas
Es, posiblemente, la parte más dura del proceso judicial del accidente del Alvia: las declaraciones de los supervivientes de la catástrofe y de los familiares de los fallecidos aquel 23 de julio de 2013.
La tragedia costó la vida a 80 personas y dejó 140 heridos. Ahora es el turno de escucharles. La primera en declarar fue una mujer que aquel día viajaba con su hija a A Coruña para acudir a un funeral. Las secuelas tras el accidente se prolongarán el resto de la vida. Problemas de movilidad y psicomotrices. "No hay dinero que te dé un poco de paz. Soy una persona joven que no puedo hacer mi vida como la había hecho antes", explicó la hija.
Fue entonces cuando la jueza rompió a llorar y añadió "es la primera y ya estoy llorando". La tarea será dura para la magistrada porque se han admitido un total de 522 testigos, una quincena diaria.
Poco después, el testimonio de una mujer de 35 años que iba de vacaciones, volvió a ensordecer a toda la sala. "Subí a un tren con 35 años llena de energía y vitalidad y bajé siendo una persona enferma. Los años de vida que me ha quitado el accidente no hay dinero que los pague", explicó.
También se escuchó en la sala a Cristóbal, que en aquel entonces estaba completando el Camino de Santiago en bicicleta, y quien no ha podido olvidar los "gritos de auxilio" de quienes con él viajaban. "No hay un día que no me acuerde del accidente", admitió.
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