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coronavirus

Sanidad prohíbe los velatorios, limita los acompañamientos en entierros y fija un techo precios durante el estado de alarmas por el coronavirus

Sanidad establece que durante el periodo de vigencia del estado de alarma por coronavirus los precios de los servicios funerarios no podrán ser superiores a los vigentes con anterioridad al 14 de marzo. Además limita el acompañamiento en entierros a tres personas que han de guardar las distancias de seguridad.

Todo tipo de velatorios y cultos religiosos o ceremonias civiles fúnebres están prohibido desde este lunes por las medidas del estado de alarma por el coronavirus. Se restringe a un máximo de tres familiares o allegados la comitiva en entierros o cremaciones para limitar el contagio de la Covid19.

Estas restricciones se aplicarán en España durante la vigencia del estado de alarma. Los velatorios quedan prohibidos en todo tipo de instalaciones, públicas, privadas y también en los domicilios.

En el caso de fallecidos por coronavirus, no se podrán realizar prácticas de tanatoestética, intervenciones de tanatopraxia ni intervenciones por motivos religiosos que impliquen procedimientos invasivos en el cadáver. En todo caso, se deberá respetar siempre la distancia de uno a dos metros entre ellos.

En cuanto a la contratación de servicios funerarios, Sanidad dispone que durante el periodo de vigencia del estado de alarma los precios de los servicios funerarios no podrán ser superiores a los vigentes con anterioridad al 14 de marzo de 2020.

En el caso de servicios ya abonados a precios superiores, la empresa deberá devolver la diferencia y, en caso de no poder llevarlo a cabo, el usuario dispondrá de seis meses desde la fecha de finalización del estado de alarma para solicitar el correspondiente reembolso.

Las empresas deberán facilitar al usuario, antes de la contratación del servicio, un presupuesto desglosado por cada uno de los conceptos y la lista de precios vigente con anterioridad al 14 de marzo de 2020, aun en el supuesto de que resulte necesario realizar actuaciones específicas como consecuencia de los fallecimientos producidos por causa del COVID-19.