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Qué es el icing, la nueva moda que por la que puedes ser multado con 200 euros si dejas el coche aquí

Aparcar donde no debes puede salirte muy caro. Descubre qué es el icing y qué sanciones conlleva.

Coche eléctrico

Coche eléctricoAgencias

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El auge del coche eléctrico es una realidad y refleja un cambio histórico en la movilidad. Según la Agencia Internacional de la Energía, en el primer semestre de 2025 se vendieron más de 9 millones de unidades en todo el mundo, lo que supone un incremento del 30 % respecto al año anterior. Este crecimiento ha llevado a que las ciudades y gobiernos adapten sus normativas, infraestructuras y políticas de tráfico para garantizar un uso seguro y eficiente de estos vehículos.

Respecto a esto, hay una nueva infracción de tráfico en la que ha puesto foco la DGT: el icing, una práctica que está relacionada con el aparcamiento de coches diésel o gasolina en zonas donde solo deberían estar vehículos híbridos y eléctricos.

En centros comerciales, estaciones de servicio o incluso en plena calle, es habitual ver estas plazas ocupadas con coches que no deberían estar ahí. Como es lógico, este gesto genera malestar y complica el día a día de muchos conductores de eléctricos e híbridos enchufables.

¿Qué es el icing?

El icing es una técnica que consiste en ocupar con un coche de combustión las plazas reservadas a vehículos eléctricos e híbridos enchufables, generalmente situadas en puntos de recarga.

Estas plazas están reservadas para automóviles eléctricos e híbridos, y solo durante el tiempo imprescindible para recargar, favoreciendo la rotación. Es decir, una vez completada la recarga, deben liberarse. Esta medida busca disuadir y garantizar que estos espacios estén siempre disponibles para quienes los necesitan.

El nombre significa “helada”, que podemos interpretar como la sensación que siente la persona que necesita enchufar su coche cuando encuentra el punto bloqueado.

¿Qué multas conlleva el icing?

Las sanciones que conlleva esta conducta oscilan entre 100 y 200 euros, en función de la gravedad de la ocupación. Si se demuestra que la acción es intencionada, la multa alcanza la cifra máxima.

En cualquier caso, para evitar sustos, lo que debes hacer es fijarte en la señal R-308, que es la que regula estas plazas. Esta señal indica claramente los espacios destinados exclusivamente a vehículos eléctricos o híbridos y especifica si está permitido dejar el coche conectado a la corriente.

En definitiva, el icing es una práctica que supone una falta de respeto hacia las personas que realmente necesitan cargar su coche, por lo que el buen uso de estas infraestructuras es fundamental para consolidar un modelo de movilidad sostenible y accesible.

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