Una fábrica de servilletas ubicada en Frailes (Jaén) está sintiendo los duros efectos del coronavirus: la empresa lleva paralizada desde el pasado 13 de marzo y no saben cuándo reanudará su actividad.
Al igual que las cartas de los restaurantes y las vinagreras, los servilleteros han sido retirados de las mesas de los bares para evitar contagios de coronavirus, algo que afecta duramente al sector y, concretamente, a esta empresa.
“No podemos entender la norma que han sacado. Estamos todos parados, es una incertidumbre y sin saber cómo va a salir esto”, asegura Custodio Cano, propietario de la fábrica.
Antes de que comenzara la pandemia, los cuatro trabajadores de la fábrica producían a diario millón y medio de servilletas, una producción que ha quedado a cero por el coronavirus.
Antonio Cano es uno de los empleados de la fábrica y asegura estar “súper preocupado”: “Estoy parado en casa y esperando a ver qué sucede con la situación”, explica. Su situación es complicada, ya que tiene dos hijas y su nómina es la única que llega a casa. Al igual que sus compañeros de trabajo, se ha visto inmerso en el ERTE.
La fábrica lleva 15 años produciendo servilletas y dependen directamente de la hostelería. Sin embargo, la prohibición de la utilización de los servilleteros les deja un futuro incierto, sin saber cuándo podrán retomar su actividad.