Reglas dolorosas
¿Por qué solo ha habido poco más de 1.000 bajas de mujeres por reglas dolorosas desde junio?
Vómitos, descomposición intestinal, son muchas las mujeres que sufren reglas incapacitantes o muy dolorosas. Desde el 1 de junio de 2023 se pueden acoger a permisos pero poco más de mil lo han hecho.
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Se trata de una herramienta muy importante, valorada por los expertos aunque creen que hay opciones mejores. A diferencia de una enfermedad común, se paga desde el primer día de ausencia en el trabajo.
Entre junio y diciembre del año pasado, se tramitaron 1081 bajas. Para algunos profesionales, muy pocas porque afirman que el número de diagnósticos de menstruaciones incapacitantes no ha caído.
¿Por qué las mujeres no se acogen a esta medida si es legal?
El principal motivo es que algunas mujeres sienten inseguridad laboral si lo hacen; para otras comunicarlo a la empresa les produce vergüenza. Pero hay algo más a tener en cuenta. Estas bajas, se piden cada mes en función del dolor menstrual que sienta cada mujer. Si esta cree que le limita, lo consulta con su médico de cabecera y será este quien tenga la última palabra, decidirá si lo solicita o no. Las 1081 bajas no corresponden a 1081 mujeres ya que muchas pueden sentirlo en varias ocasiones.
Pero la baja por regla dolorosa solo abarca la dismenorrea secundaria. Es pues, una norma restrictiva.
Idas y venidas, reglas dolorosas, anticonceptivos, muchas mujeres viven un auténtico calvario, además de la carga psicológica que conlleva un dolor tan agudo e incapacitante
Bajas de entre 1 y 21 días
Los facultativos estudian cada caso, analizan el historial de cada paciente y según sea este, pueden recomendar un permiso de incapacidad temporal de entre 1 y 21 días. La media, suele ser de poco más de tres días de falta laboral.
La causa de la baja ahora sí se comunica a los departamentos de recursos humanos. Padecen endiometriosis, lo que a muchas provoca dolor uterino, mareos o bajadas de tensión. Lo peor el tiempo que se tarda en recibir este diagnóstico, entre siete y diez años. Una pesadilla ante la que algunos países de Europa han tomado medidas como el teletrabajo pero que en España todavía no existe. Como tampoco hay unidades especiales en todos los hospitales, lo que podría acelerar el proceso y lo que es más importante, aliviar el dolor físico y psíquico de estas mujeres.
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