Plantean crear una formación profesional de maestro vidriero para que no se pierda este oficio artesano

A más de 1.000 grados y a mano pueden crear la copa más delicada. Como explica Diego, uno de los tres últimos maestros del vidrio que quedan en España, el trabajo manual se hace aprovechando el material caliente.

Se trata de un trabajo pasional, como él mismo explica: "Le estás dando vida a la lava, estás moldeando y dominando un ser inerte, es maravillosos".

Hace miles de años los egipcios descubrieron por casualidad que si se mezclaba arena, sosa y fuego, se obtenía el vidrio, un material muy delicado. Ahora ese arte lo disfrutan los turistas todos los días a La Granja, en Segovia.

Además, se estudia que se pueda perpetuar este conocimiento a través de estudios de formación profesional.