Galicia

Oleada de apoyo a un hostelero gallego tras una mala crítica por el uso de la mascarilla

José, dueño del Café Fina Viñas en A Illa de Arousa, recibió una crítica por pedir a dos clientes que utilizasen la mascarilla.

Críticas al bar de José

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Galicia

Oleada de apoyo a un hostelero gallego tras una mala crítica por el uso de la mascarilla

José, dueño del Café Fina Viñas en A Illa de Arousa, recibió una crítica por pedir a dos clientes que utilizasen la mascarilla.

José, propietario del Café Fina Viñas en A Illa de Arousa, en Pontevedra, respondió a una crítica negativa en la que le acusaban de "falta de tacto" por haber pedido a dos clientes que se pusieran la mascarilla mientras tomaban algo en la terraza de su local. El apoyo ha sido total por parte del resto de sus clientes y usuarios de las redes.

Es por todos conocida la situación en la que se encuentra la hostelería en estos momentos. En Galicia hace apenas dos semanas que ha arrancado la desescalada y, tras meses con la persiana bajada, han empezado a reabrir, aunque con límites de aforo, horario y limitaciones a la movilidad.

Por ello, José no se podía creer lo que estaba leyendo cuando recibió la crítica que un cliente de su establecimiento había dejado en Google tras tomarse una café en su terraza. "No somos muy de hacernos eco de las reseñas que para con nosotros y/o nuestros compañeros se tienen en las redes sociales y que tan en boga se han puesto en su momento, pero hay momentos en los que se te abren las carnes al leer cosas como ésta". Él mismo publicó este mensaje en sus redes sociales adjuntando la crítica en cuestión.

Críticas por la reseña

"Hoy nos han reseñado con un 1 punto por NO dejar a dos clientes pasárselo chupi y tomar el sol totalmente desprotegidos, poniéndose ellos en riesgo, pero poniendo en riesgo a todo un sector, y si voy más allá, a toda una población". José asegura que lo único que hizo fue recordarse a esta pareja que tenía que ponerse la mascarilla. Algo que hicieron en ese mismo momento sin poner problemas. La crítica llegó después.

"Fatal experiencia", "totalmente desproporcionado", "le faltó tacto", esto es lo que asegura este cliente que, en esta ocasión, se ha quedado solo en su reclamación.

Clientes del bar, vecinos y usuarios de las redes en general, han mostrado su apoyo a este hostelero que incluso asegura haberse sentido desbordado con tantos mensajes y muy agradecido por todas las muestras de cariño.

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