99.013167

Publicidad

okupas

Okupas expulsados por la presión vecinal en Portugalete

En octubre de 2019 centenares de vecinos ya lograron sacar a una familia de okupas de otra casa en la que vivía una mujer de 94 años.

La imagen era curiosa. Decenas de agentes de la Ertzaintza apostados y preparados para desalojar a cuatro okupas de una vivienda el barrio de Repélega, en Portugalete. Numerosos vecinos se habían concentrado para exigir el desalojo, cansados de las quejas y los insultos. Los okupas abandonaron la vivienda por la presión vecinal.

Okupas escoltados

Un amplio dispositivo de la Ertzaintza acudió al lugar a la vista de que la concentración de vecinos crecía debido a la llamada que se había hecho en las redes sociales. "Han atracado a una señora hoy, la han dejado en el suelo sangrando" afirma un vecino. Otro residente de la zona dice que no tiene nada en contra de los okupas pero "si vienes a vivir perfecto pero si vienes a delinquir pues no".

El robo del móvil

El robo del un móvil a una persona mayor provocó la indignación de los vecinos. Fue el detonante de una comunidad cansada de los continuos insultos y amenazas. "El barrio pues al final se cansa y este tipo de cosas, de comportamientos no los vamos a permitir nunca" dice otro residente del barrio.

Dicho y hecho. Un gran despliegue de la Ertzaintza impedía que nadie se acercara al piso. Muchos momentos de tensión y pasadas unas horas se lograba el objetivo. "El pueblo unido jamás será vencido" se escuchaba gritar a la muchedumbre en la calle.

"Faltaban el respeto a las chavalas que pasaban. Se dedicaban a robar a la gente" insisten de nuevo los vecinos. "Con chicas jóvenes, escupiendo, diciendo 'que tengo COVID' recrimina un vecino de la zona.

Cuando esta mañana bomberos y Ertzaintza procedían a entrar en la vivienda para tapiarla encontraban en el interior a cuatro nuevos okupas. Habían burlado la vigilancia policial y habían entrado por una ventana trasera.

El segundo desalojo

No es la primera vez que sucede en esa localidad. Hace ocho meses, en octubre de 2019, los vecinos de este barrio de Portugalete lograban desalojar con su movilización una casa okupada en la que vivía Victoria de Castro, una mujer de 94 años.

Centenares de vecinos lograron sacar a una familia con una larga trayectoria de ocupaciones. El caso de Victoria abrió una nueva forma de actuar contra los okupas. Esta noche los vecinos avisan que volverán hacerlo para echar a otro grupo conflictivo de okupas.