Un militar ha rajado las ruedas de 11 coches en Ribadeo, Lugo. Según los investigadores, el hombre, de 36 años, quería pinchar las ruedas del coche de su expareja y del actual compañero de ella, y destrozó también las de los coches que estaban aparcados al lado para que pareciese un acto de vandalismo.
La estrategia funcionó. Al menos en un primer momento. Eso fue lo que pensaron los vecinos, que se trataba de un acto vandálico. Lo mismo creyó la Guardia Civil cuando tuvo conocimiento de la situación. Hasta que comenzaron las investigaciones y descubrieron que había algo más.
Los once vehículos que sufrieron los destrozos estaban aparcados de forma consecutiva en una céntrica avenida de Ribadeo, en Lugo. El acusado, un militar residente en Lugo, se dirigió al lugar con intención de pincharles las ruedas hasta en dos ocasiones, lo cual hizo que los propios vecinos sospechasen que algo raro estaba ocurriendo.
En la segunda ocasión, el ahora acusado, habría aprovechado que apenas unas horas antes habían ardido varios contenedores en un calle paralela para volver a pinchar las ruedas del vehículo de su expareja y su actual compañero, tratando de que se enmarcase en ese contexto de vandalismo que habría vivido la localidad esa noche.
Pero esta vez no tuvo tanta suerte. La Guardia Civil, con las sospechas que tenía, revisó las imágenes de las cámaras de seguridad de la zona y tomó declaración a los vecinos. La colaboración fue clave para descubrir lo ocurrido. Uno de ellos fue el que dio la voz de alarma, le sorprendió ver a un hombre en la calle de madrugada, vulnerando el toque de queda.
El militar acabó detenido y tras tomarle declaración fue puesto a disposición judicial. Se le imputa un supuesto delito de coacciones y los daños ocasionados en los coches, a los que habría rajado las ruedas.
