Gestación subrogada

Los menores nacidos por gestación subrogada que conocen su origen desde pequeños son más felices

Un estudio de investigadores de la Universidad de Cambridge realizado durante 20 años ha llegado a la conclusión de que los niños y niñas que nacen por gestación subrogada son más felices si son informados antes de que cumplan los siete años de cuáles son sus orígenes.

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Que la sinceridad en la relaciones es un elemento de cohesión y estabilidad es una ley prácticamente universal. Y también es una norma aplicable a la relación con nuestros hijos. La verdad siempre por delante si queremos que crezcan sanos mentalmente y con la información necesaria que les dé herramientas útiles para enfrentarse a la vida y ser más felices.

Esto, que parece de sentido común, ya tiene un respaldo científico aplicado a la información que se le proporciona a los niños y niñas gestados por subrogación. Poco después de que la gestación subrogada fuera uno de los temas más comentados en España por el caso de Ana Obregón, se ha conocido un estudio sobre el impacto psicológico en la salud mental de los bebes nacidos por gestación subrogada

Investigadores de la Universidad de Cambridge han estado dos décadas haciendo un seguimiento y las conclusiones del estudio son claras: los niños crecen más felices si saben de dónde vienen. Una de las investigadoras, Susan Golombok, cree que cuanto antes lo sepan, mejor. Antes de que cumplan siete años en cualquier caso. "Parece haber un efecto positivo en ser sinceros con los niños sobre la forma de su concepción cuando son pequeños, antes de que vayan al colegio", asegura el estudio.

En España, no sólo es una recomendación: el derecho a conocer sus orígenes de los adoptados está recogido por varias leyes desde hace años. Los legisladores intentaban barrer a golpe de leyes décadas de ocultación, denegación de datos por parte de las instituciones, encubrimiento de adopciones irregulares... y reconocer un derecho que es básico: el derecho a saber.

En el artículo 180.6 del Código Civil, que dice: “Las personas adoptadas, alcanzada la mayoría de edad o durante su minoría de edad a través de sus representantes legales, tendrán derecho a conocer los datos sobre sus orígenes biológicos. Las Entidades Públicas, previa notificación a las personas afectadas, prestarán a través de sus servicios especializados el asesoramiento y la ayuda que precisen para hacer efectivo este derecho. A estos efectos, cualquier entidad privada o pública tendrá obligación de facilitar a las Entidades Públicas y al Ministerio Fiscal, cuando les sean requeridos, los informes y antecedentes necesarios sobre el menor y su familia de origen”

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