La Comunidad de Madrid anunció que cerraría también las peluquerías y barberías para "proteger" a sus profesionales, que trabajan "piel con piel" con los clientes, en contra del criterio del Gobierno nacional, que ha optado por que estos establecimientos se mantengan abiertos durante el estado de alarma.
Fuentes del Ejecutivo central explicaron que decidieron que este tipo de negocios podían permanecer abiertos por razones de higiene y por la intención de alterar solo lo mínimo posible la vida de la gente.
Sin embargo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha anunciado que ordenará el cierre de las peluquerías y barberías "porque no se entiende que los profesionales de este sector tan numeroso en Madrid, que tienen que estar piel con piel en contacto con los clientes, tengan que estar abiertos".
"Tengo que protegerlos por encima de todo. Nuestros mayores y otras personas que necesiten el servicio de peluquería prefiero que tengan el pelo sucio y que estén sanos", ha añadido.
El Ministro de Sanidad, Salvador Illa, se puso entonces en contacto con la presidenta madrileña para explicarle que solo él tiene esa competencia. Finalmente, Pedro Sánchez a decidido incorporar la suspensión de la actividad comercial de las peluquerías, según señalan fuentes del Ejecutivo.
Este servicio sólo se mantendrá a domicilio para garantizar la atención e higiene de las personas más vulnerables, razón por la que se incluyó en el Real Decreto.