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Coronavirus

Los puentes y festivos que la pandemia de coronavirus nos robó

Desde hace un año no se puede viajar en los puentes debido a las medidas sanitarias para frenar la pandemia de coronavirus. La alternativa son las escapadas cercanas y el turismo dentro de cada comunidad.

Llevamos mucho tiempo sin disfrutar de los puentes, esos festivos que tiene todo el mundo y se concentraban muchas personas viajando al mismo tiempo. Ahora, la alternativa son las escapadas cercanas y el turismo dentro de cada comunidad.

El primer puente al que tuvimos que renunciar fue el puente del Pilar en octubre de 2020. A ese le siguieron el de Todos los Santos en noviembre, unas fechas en la que la Comunidad de Madrid también se cerró para La Almudena. La Inmaculada en diciembre tampoco se celebró.

El año empieza de nuevo con restricciones, este puente de San José también lo hemos perdido y para la próxima Semana Santa también está confirmado el cierre. Falta por ver qué pasa con el puente del 1 de mayo. Cae en sábado, y en Madrid el día 3 sería festivo porque el día de la Comunidad, 2 de mayo, cae domingo.

En Cataluña no hay puente de San José, pero sí que es el primer fin de semana de libre movilidad comarcal y muchos han optado por visitar lugares cercanos como Sitges. Desde hace 2 meses y medio nadie podía moverse libremente por la comunidad, por eso, muchos barceloneses han optado por salir de su comarca e ir a Sitges, que está situada a 40 kilómetros de la ciudad condal. El plan consiste en pasar unos días en la playa, caminar por el paseo marítimo o disfrutar de las terrazas. La Generalitat pide prudencia porque este fin de semana puede marcar las medidas que se tomarán en Semana Santa.

Hace tiempo que no vemos las carreteras y los aeropuertos llenos. Cada vez que sumábamos 2 o 3 días libres se aprovechaba para hacer viajes y resetear. Aún así, hay quien no renuncia a seguir haciendo planes, aunque a veces cuando llega la fecha hay que cancelarlos. Ahora esos planes son de cercanía para conocer más nuestros lugares.

En la capital echan de menos ir a la playa y en la playa echan de menos pasar unos días en la ciudad. Por ahora, es mejor vivir al día e ir mirando de semana en semana para ver cómo evoluciona la situación del coronavirus o directamente a largo plazo. Ojalá que pronto esos planes y la realidad coincidan.