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Secuelas del coronavirus

Las secuelas neurológicas del coronavirus: "Noté que se me durmió la pierna y al día siguiente ya no sentía la barriga"

Médicos y científicos estudian las secuelas en pacientes que han pasado el coronavirus, algunas poco frecuentes como la que afecta a Lorena González, una coruñesa de 34 años que ha contado Antena 3 Noticias cómo empezó a notar que su cuerpo se dormía.

Hay muchas líneas de investigación sobre las secuelas del coronavirus en pacientes supuestamente curados del Covid-19. Fatigas, dolores y mareos son algunas de esas secuelas persistentes que se han descrito hasta el momento.

En el caso de Lorena Gómez, empezó a notar como su cuerpo se iba durmiendo. Lo ha contado a Antena 3 Noticias.

El cuerpo se le iba durmiendo

Lorena González empezó a notar cómo se le adormecía paulatinamente la parte derecha de su cuerpo, empezando por un pie, luego toda la pierna, a continuación la sensación llegaba hasta la barriga y, finalmente, le subió hasta el pecho. Fue al centro de salud de Carballo (A Coruña) y le derivaron al hospital de A Coruña donde constataron que se trataba de Covid-19. Los médicos le han informado de que raras veces el coronavirus se manifiesta del modo que ella lo ha sufrido, con inflamación en la médula.

Sintió miedo y mucha angustia

Esta joven peluquera, de 34 años y natural de Noia (A Coruña) aunque reside en Malpica, en un principio sintió miedo y mucha angustia, por lo desconocido de la situación y porque "no sabía cuánto tiempo iba a tener que estar aislada". Su mayor preocupación radicaba en que tiene dos hijas, una de 14 años y otra de seis meses, que nació durante el confinamiento. "No saber cuándo iba a poder abrazar a mis hijas fue algo muy duro", recuerda con tristeza.

Ingresada en el hospital

Tras seis días hospitalizada, decidió pedir el alta voluntaria y seguir el aislamiento en su casa, ya que se había recuperado casi por completo, apenas le suministraban algún antiinflamatorio cuando tenía dolor y consideraba que en su domicilio estaría menos expuesta al virus que en el trasiego del hospital.

Transcurridos unos días desde que volvió a su casa, confía en que no le quede ningún tipo de secuela tras superar la Covid-19, pero todavía está preocupada porque "el virus sigue por ahí suelto". Se siente afortunada porque "vi personas, sobre todo mayores, que realmente estaban muy mal", así que "yo me siento una privilegiada por haber pasado la enfermedad de esta manera. Este mismo lunes tiene cita en el hospital para realizar una resonancia magnética que le permitirá conocer si le ha quedado algún tipo de secuela.