Incendio en Palma

El ladrido de su perro la despertó de las llamas en La Palma: "Vi las llamas a 2-3 metros de mi casa (...) Ya no queda nada"

Lina es una de las desalojadas por el avance de las llamas en La Palma. Su casa ha quedado completamente calcinada: las llamas no tardaron nada en avanzar hacia su vivienda.

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La isla de La Palma ha vivido una noche muy complicada por el bravo incendio en la zona. Los bomberos trabajan sin descanso para frenar el avance de las llamas y disiparlas de una vez por todas. El fuego ha calcinado más de 3.500 hectáreas. El foco más preocupante es el que avanza en el Parque Nacional de La Caldera de Taburiente. Equipos especializados en tierra trabajan en la zona, además de 11 medios aéreos que actúan en el foco de Tijarafe.

Varias viviendas han sufrido estragos por el avance de las llamas, como en la localidad de Puntagorda. La familia de una de las casas calcinadas tuvieron que escapar de la vivienda 'con lo puesto'. Las llamas lo 'devoraron' todo. No se ha podido salvar nada de la casa. Además, un total de 78 personas continúan evacuadas en La Palma. La previsión es favorable y podrían regresar a sus casas durante el trascurso de la tarde de este lunes.

Debido a la complejidad de la orografía, las tareas de extinción están siendo complejas. El tiempo ha mejorado este lunes y se han unido 10 helicóptero a los más de 500 efectivos que trabajan en el incendio de La Palma. Puntagorda ha sufrido las llamas con virulencia y allí tenía su casa Lina. Fueron los ladridos de su perro lo que la despertaron. "Salí a ver que pasaba y vi las llamas a 2-3 metros de mi casa", ha explicado la joven a Antenas 3 Noticas.

Lina llamó a emergencias, pero la ayuda no llegó. Fue entonces cuando "se encendió toda la palmera en 10 segundos y ya saltó (el fuego) a la casa". Apenas han quedado los muros de la vivienda en pie: "Hasta los metales están fundidos. No queda nada". Por ello, la joven pide ayuda para reconstruir la casa y poder empezar de nuevo.

Las llamas se echan sobre La Palma

En las últimas horas, los cuerpos antiincendios se han aprovechado del cambio de la dirección del viento, el aumento de la humedad y la bajada de temperaturas para extinguir el fuego. No obstante, aunque las condiciones meteorológicas han ayudado a ralentizar las llamas, el incendio aún no está controlado.

Apenas se han podido destinar medios hasta el flanco del Parque Nacional de la Caldera de Taburiente porque se ha priorizado la defensa de las zonas de población.

Los bomberos han levantado en las últimas horas cortafuegos para intentar perimetrar el incendio. "Estamos haciendo una quema de ensanche para que cuando el fuego llegue allí impacte contra zona negra y se pueda controlar este frente", explicaba Miguel Ángel Martín, coordinador de los Bomberos Forestales EIRIF.

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