Como las restricciones obligan a cerrar pronto la hostelería ahora, en lugar de quedar a última hora, se queda a desayunar. Es el 'desayuneo' una nueva moda que ha supuesto que muchos negocios de hostelería puedan seguir adelante en tiempos de coronavirus.
El avance de la pandemia de coronavirus ha obligado a instaurar medidas más estrictas para contener los contagios. Muchas de ellas afectan a los hosteleros que ven como la limitación de los aforos y los horarios de cierre perjudican a sus negocios.
En muchos puntos de España la hostelería está cerrada y donde pueden abrir tienen que renunciar al menos al servicio de la cena o abrir sólo por la mañana.
Las medidas también afectan a los clientes así que cada vez más gente se ve obligada a cambiar sus costumbres. Se deja de un lado el 'tardeo' y se instaura el 'desayuneo': quedar para desayunar. Es una forma de adaptarnos a las restricciones.
El único inconveniente es que hay que acordarse de poner el despertador, aunque a algunos les cueste madrugar. Pero todo sea por pasar un rato con nuestros seres queridos.
A los clientes les parece bien esta nueva moda y aunque cada uno tiene sus preferencias a los hosteleros les parece bien esta nueva tendencia. Dicen que mucha gente ha descubierto que el primer momento del día es un rato bonito y bueno.
Un momento que, a partir de lunes, se alargará una hora más por la mañana y también al medio día. Cualquier momento es bueno para compartir un café aunque después haya que ir a trabajar.